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a del Colegio Mayor de Oxford,
, la pena es que no tenemos alojamientos individuales, más bien habitaciones compartidas, con zonas comunes, y la cafetería que es gratis para el personal sanitario, nos aseguraríam
este fin de semana, la próxima semana me incorporo al trabajo."- le dije con seguridad, mientras veía llegar con cara ansiosa, sudoros
as por elegirnos."- me dijo la jefa de personal, antes de colgar, mientra
térica."- le dije nada más colgar, ante l
n el celador en la puerta, ... es un maldito ... código rojo... Ahora dime ... ¿Es como ... para estar nerviosa? ... ¿o no?"- me dijo mi compañ
o no, de invitados incomodos o alterantes, ya fueran familiares, o de otro tipo, que
sino porque siempre venía acompañado del más incómodo de todos los invitados, el mejor amigo de su hermano, que resultaba ser el exnov
e la mayor flota pesquera de Oceanía, el indomable, serio, y estricto Lousntak Bell, y como no, su hermano menor, y v
muchas tradiciones, y secretos, algunos muy graves, y de muchos de esos secretos y
rebató la vida de mi madre, trabaja sin parar, tras su muerte, y mi recuperación, después de meses tras el trasplante, nunca más v
migo, en referencia del que tenía con su hija Kiora, algo que yo no entendía, y que trataba de paliar implicando, de forma directa, a mi prima en todos los halagos, o regalos, que mi tío me daba, y que Kiora no recibía. Pero esto fu
la playa, algo que teníamos prohibidísimo, sobre todo yo, por razones que pronto supe que tenían que ver con la tradición principal que se
tía con mi prima, ya que ella nunca recibió una, oímos una fuerte discusión en la ventana abierta del despacho de mi tío, que estaba encima de la puerta del garaje, y esta se producía en
respondía con palabras bruscas, dolorosas, y con monosílabos en ocasiones, supimos que la boda
elante, todo había sido culpa de la maldita tradición familiar, mi madre fue primero amiga, compañera de clase, y co
tener una copia de la mujer que amaba en su casa, esa fue mi tía, aunque su parecido sólo era físico, su carácter era radicalmente opuesto. Así que su matrimonio fue un trato, a cambio de riqueza, que al principio a m
l es el que más insiste en que yo regrese a cumplir mi deber de heredera, de hecho, fue mi tío quien eligió, alentando a mi padre, el hom
ncontrolable, por mi parte, esa tarde no fuimos al final a la fiesta, sólo nos fugamos, para estar a solas,
opiedades, ni mi prima, ni yo, queríamos convertirnos en las próximas CEOs de grupo Bell, Kiora quería dedicarse al mundo de la moda, ser diseñadora, y des
do ni por mi padre, ni por mi tío, haría lo que fuera, mentir, engañara, huir, incluso vender mi alma al diablo, pero desde lueg
nuestros sueños, pese a ellos, y sobre todo que nos apoyaríamos para cumplirlo, no necesitábamos que nuestras familias nos quisieran,
sa, ¡Demonios! No tienes tiempo para que huir..."- la voz de Mabel m
es hora de enfrentarlos."- le dije segura, mientras ella m