de golpe

ventana, había un hombre alto,

traba por la ventana,

i corazón se detu

a

r casualidad en el mausoleo de

cierto modo, había tenido

en el rancho, a veces me escapaba a

, lo enco

con la ropa desarreglada y

ado. No estaba

in querer problemas, pero

me" , s

y lo arañé

llorando, gritando su nombre. Era una

o había drogado, t

dente, un político joven y

encontramos varias v

en nuestro

era inteligente, ambicioso y te

migo en esos a

esc

salvajes, imaginé que ese joven

dijo Alejandro, ace

uguetona cruz

a mano frente a mis ojos, como si estuvier

ití, mi voz un poco ronca. "No

parecería que sabías mi identidad todo el tiempo y que te acercaste a

a era im

"Supongo que

mpaciente conmigo" , dijo, sus ojos brillando con diversión.

un poco al

fría y él no paraba d

s. "Entonces, ¿por qué yo? ¿Por

ión se vo

hacia la ventana, mirando h

arca" , dijo finalmente,

manipuladora que controlaba gran parte de la política del país desde

alacio. Alguien que pueda controlar. Alguien que

para m

pueda controlar, pero que también sea lo suficientemente fuerte para manejar el nido de

s lo ente

o me resca

e era una pieza útil

ofrecer al nu

un viejo general leal a mi familia. Una historia trágica y romántica que l

ó fija

posible. Sonreírle. Servirle té. Recordarle que su tiempo se acabó. Y mantener el control

uevo, su rostro a c

ión. Y la oportunidad de vengarte

cto con e

ya había sido

s podía