spertó, el mismo que sentí justo
la que había decorado con tanta ilusión para mi boda,
ara llena de preocupación, diciéndome
con mi mejor amiga, Valeria, la mujer a
taba día a día mientras ellos vivían su romance a mis
adilla, era la cruda reali
él la eligió a ella, qué
or: no me casaría con Ricardo, no d
r, mi futuro había cambia