borrón. Mi teléfono vibró. Era un número que no reconocía, per
ró una respuesta. "¡La familia está encantada de que finalmente hayas aceptado ser rec
a familia que se había quedado de brazos cruzad
milia Cárdenas estará allí. Tu padre... bueno, antes de fallecer,
do. Con un hombre que
supuesto", agregó mi tío apresuradament
edad para aparentar, y una mujer apasionada a un lado para divertirse
abios. "Claro. ¿Por qué no? Un mat
ra, tal como me había opuesto a reconocer a su familia durante años. Me ha
je, mi voz hueca. "Como dicen Alejan
Amor, lealtad, para siempre... todo eran ilusiones. Qui
era Alejandro. Casi rechacé, pero una
o... creo que mi estómago está sangran
ea se
ba con el estrés. Había tenido un sangrado importante en la universidad, y me había ate
bral. Recordé todas las veces que me había defendido, me había protegido. ¿Era este hombre,
rció con un dolor
acelerada. "Al Club Eni
on miedo. Irrumpí en el salón privado que había mencion
con un grupo de amigos. Karen estaba sentada en
e sus amigos, todos mi
ia. "¿Ves? Te dije que est
cuando vio mi cara. Parecía cul
quiera había notado, mi cabello pegado a mi cara, mi pecho
, su voz teñida de una indiferen
las caras petulantes, todo se desvaneció en un rugido
Karen, palmeando el asiento a su lado. "Úne
je, mi v
ceño. "Sofía, siént
Fue un beso largo y ostentoso que hizo que sus amigos vitorearan. Yo sol
Rey. Sus ojos se posaron en m
ordeno que... veamos... vayas allí y dejes que ese hombre", señaló a un extraño
lló en silbi
Miré a Alejandro, esperando que
u rostro. No había preocupación en sus ojos. Ni protección.
tro de mí finalmente, ir
sonrisa mu
ella de whisky
lugar", dije, mi voz in
hol me quemó la garganta, un camino de fuego hasta mi
Alejandro, un atisbo de pánico en su
nde. No seas tan aguafiestas, Alex". Lo jaló hacia
ro vaso.
vi a Alejandro y Karen bailando, sus cuerpos presionados el uno contra el ot
an felices. Y yo
e que la oscuridad me consumiera fueron sus siluetas entrelazadas, una p