rles saber que estaba bien y que ya había llegado a casa. Por lo que pudo escuchar, Raúl se había quedado muy preocupado por ella y también algo con
a divisó la figura de su amiga-. No te escuc
estarte. Además, llegué bien tarde... o temprano -Laura
Ra
incidente -se acomodó a su lado-. Realm
teligente que es -suspiró, incómoda-. La verdad
er raro y fuera de lugar -le di
es posible que no tenga que hab
sabía que no era el arrendador -él siempre venía los domingos por la noche
uso los ojos como platos. Roxanna frunció el ceño al notar su reacci
, Laura? -
pondió su amiga con u
visó la cabellera rubia de Marcos
no? -preguntó Laura, moles
, impaciente-. Pero será mejor que le
sus habituales trajes de marca. En su lugar, llevaba un suéter gris, jeans aju
te, ella había abierto la puerta sin notar que seguía en ropa de
. -empezó Marcos, pero
u mente se quedó en blanco. Tragó con difi
notar su atuendo y, aún llena de rabia, arremetió c
pezones eran una invitación peligrosa a su imaginación-. Hoy tenemos que ir a casa d
xanna rodó los ojos, fastidiada, y entonces miró su ropa. Comprendió
ió riendo has
las tetas! Ya me imagino todo lo que dirá a sus amigos:
nojada-. A tu jefe se le cayó la baba. Fue divertidís
stima, pero por favor... Marcos es del tipo de hombre que aborrece a
sperada, y alzó lo
s de quicio! Ese velo que tienes, ese que te hace pensa
a realidad. No todas podemos darnos el l
zos-. ¿Sabes qué? Te dejo. Parece que
muy molesta. Sabía que Roxan
osible para que su amiga viera su belleza, el espejo d
or de las caras. Marcos se limitó
o -respon
juntos -empezó Marcos-. Es probable que sea lo primero que nos pregu
a soy! -le lanz
eis meses. Y estamos p
pensaste en qué vamos a decir despu
sonrió
cupes. Sé q
s los miembros de su familia. Roxanna intentó memorizar nombres, aunqu
ndría tan nerviosa. Sentía que no podría decir una palabra. Pensaba en lo que los padres de Marcos creerían de ella. Quizá
, como cabía esperar: una mansión extensa.
que hacía era halagar a Roxanna. Como era la primera vez que conocía a una de las novias de su hijo, estaba emocionadí
El almuerzo está listo -
día estar más a gusto. La hermanita de Marcos era
abían ensayado. Amalia, la hermanita, no paraba de hablar con Roxanna mient
-preguntó de pronto Amad
-respondió e
é que mi hijo no ti
entando evitar el interrogatorio-. Ya
tender... No creí que m
uena noticia. Tenemos
petó Amador, fru
malia se alegró también y preguntó s
el lugar? -pre
buscando -res
ción, pero Amador observaba con sospecha. I
! -gritó d
-pregunt
-susurró
se apoderó
o! -bramó Amador-. ¿
novia -repiti
? ¿Sabrá Dios qué hiciste
ovios. Vamos a
tonces... ha
anna se debe sentir incó
es tu novia y no una fachada para que no piense que hemo
a-. Esto se suponía que e
que esta chica no solo es mi novia... sino mi razón de ser
s. No dijo nada. Solo pensó: ¿Cuá
a enojado, en realidad estaba asustado, nervioso y lleno de dudas. Nunca antes había tenido un
lo ocurrido. Pensaba en preguntarle a Marcos qué pasaría ahora. Ella ya había cumplido su parte, y aunque e
onces, ¿ya está?
ahora ten
No hablas en serio, ¿verdad? Yo ya cumplí con lo tratado. No
zcla de increduli
umpleaños d
es dentr
xactamente
gó con la cabeza-. No
quieras, lo que
ada. No quie
o estancarme contigo? ¿Que qui
erida e indignada-. Puedes busca
o pídeme lo que quieras.
como un niño asustado. Una súplica. No era u
o con una calma extraña. Como si a
-dijo de pronto, si
erd
nes de dólares para
sabía que tenías
gía estética. De todas formas, si me niego m
prendido, como si
s es mucho par
lo quiero
ro lo tendrás cuando mi pa
un trato,
es que vivir co
profundamente-. ¿Cómo
redacte el documento. Será confi
acue
emoción. Sabía que no podría zafarse de lo que venía, así que al menos pensó en sacarle algún provecho. Po
ía, sino porque su avaricia era mayor. Su deseo por heredar la compañía superaba todo:
bía marc
seguir con su plan