Garz

oficialmente el cetro del poder: el título de Director General del imperio Villarreal-Garza. Era una mera

personal de la casa dejaba bandejas de comida fuera de mi puerta, y eran retiradas ho

rvía como un recordatorio constante. Palpitaba con un dolor sordo, una

on de nuevo. Un bombardeo incesante de v

dice que es solo un acuerdo de negocios. D

Elara. Una obligación. Me dijo que n

ya? Harías las cosas much

mí. Quiere estar conmi

vientre de embarazada orgullosamente a la vista. Fernando dormía a su lado, su b

noches, incluso con el bebé. ¿Cuándo fue la última vez

i rabia, ni lágrimas. Solo un vasto y frío vacío. Con c

to de los ancianos Villarreal de proyectar una imagen de estabilid

za en alto. La larga y pulida mesa de caoba estaba llena de los rostros del clan Villarreal: tíos, tías, primos. Sus miradas

aría el patriarca, era mi derecho de nacimiento. Era el asiento que mi madre había ocupa

so un acto deliberado de

ces me

ración. El mundo se

rrucada junto a Fernando

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