do se enojaba solo veía humo a su alrededor, no entendía como una mujer podía

e tuvo en frente y pidió la carta, el día no había comenzado bien, pero la comida y un buen postre lo solucionaría, miró cada m

perfección, estaba fascinada

sa más Ad

e tenía en una conste excitación, primero por su rabieta tan espectacular y ahora por la

orma cómica a sabiendas de que la mirada de su amigo e

o tenía razón, la mujercita

mientras se levantaba, killiom le dio un apretón de mano, sin prestar una pizc

l postre de nueces con frutas, la especiali

sorprendió por qué un hombre de regalará un postre, además desde donde estaba, había notado que el hom

n forma de agradecimiento solo levantó su dedo

do — sentenció él, ju

dad la dejo helada, ese era el hombre de la discoteca, ese buenarro que medio h

o y una piel algo bronceada, paso su mirada por el cuerpo del hombre y que grato era el pa

darla, — un gusto el conocerte, mi nombre es Killiom mcklain! — dijo con u

oy Maite — dijo mientras daba un apretón y sus pensam

que el hombre tenía? — Las manos grandes

deó levement

da? — pregunto ella mientras fruncía el ce

ndió, nadie se había atrevido a de

dijo Kill, no tenía ni la más mínima razón para no

guno de los dos añadió una sola palabra. Al llegar al lugar, quedó sorprendida, era bastante espectacular, todo perfec

centro en el lado derecho, con una cara totalmente sería y una mirada ambigua, pareciera el alma de viejo en un cuerpo joven. Pensó en lo distinta que había sido ella en la niñez, todo eran sonrisas y j

rás, mientras besaba el cuello de la joven, olía a coco y vainilla, su olor era deli

que no pasarían de los 4 años dormidos justo en el centro de la cama. En cuestión de segundos Maite

Cómo un padre de familia podría dejar a

odo tipo de comentarios desagradables sobre padres irresponsables.

en un cartel que estaba justo debajo de los

a en adelante

estaba enojado, feliz, triste, el hombre no daba i

, el pequeño se levantó, llenando el lugar con un fuer

a ser demasiado insoportable, estaba tan ensimismado por la situación y esta

erón? — dijo Maite

caminando directamente en su direcci

por la ayuda! — dijo él y sin más l

or la actitud del recién conocido u con el mucho orgullo que tenía,

n en lo absoluto los malos padres y este era el perfecto desastre de u

zar su principal labor, ir de compras,