e ve radiante desde cualquier ángulo. Mamá ya

para inspeccionar. No hay moros en la costa. Camino por el

la sala. No puedo salir por el frent

ierra una puerta siempr

ped que aún conserva algunas gotas de

ingo su silueta recos

ello y aliso m

s a su rostro y

ina qu

nr

a escurridiza que se

r

mo lo

a de ti — me dice presuntuoso to

un par de cosas.

ervando para conocerlas mejor en un futuro pr

i cuerpo se pega completamente al suyo. Acerca su rostro al mío. Me embeleso con

abello. Suspira y yo soy puros nervios. Me separo

— dice mientras repasa

razo y tomando su man

piel. ¡Qué calor! Nos acostamos en

arece una ardilla,

a de allá parece un elef

o soy tan grande ni peso tan

tector, inteligente y tienes es

sea tu príncipe? E

Mi elefante azul, azul co

otro bajo el árbol junto al lago. De

o sacudo. Poco a poco

ar. Si cada vez que despierte tú estás al

ndiendo su cuerp

rrando en mi oído. Erizando mi piel.— ¿No ves que m

e quieres tend

s labios, del placer de besarte. Nos casaremos cuando tengamos lo

os podrás tenerme completa — digo tra

s que pueda aguantar otros dos años? Eres mía y yo tuyo, lo sabemos d

is labios a los suyos y lo beso. Es apenas un ligero roce,

y me meto en el agua. Él, desde la orilla

l se quita la camisa y los vaqueros y se mete en el agua

ue la felicidad existe. Estar a su lado, en cualqui

s hacer cuand

e belleza indescriptible. Ser una gran escritor

e me tiene loco. Tendremos cinco hijos y

lmente piensa casarse conmigo. Me abr

te dirá que

e sí? — pregun

lo pr