ue compraba, mis gas

un año de matrimoni

ue tenía la esperan

n práctic

, dejándome atr

muy importante y

Tenía un rostro r

idad opaca. Di una

, la respuesta a mi so

los ojos negros de Silvi

defnitivamente era u

e quería a

ign

cina de mi esposo y

a ninguno de ellos,

cción al ascensor. Ya

solo quería una cosa:

oras. Sentí pasos lige

Sabía quién era. La

ien estaba detrás ta

ntaron y la caja de meta

pared de aluminio

orpe y p

mal momento que

a los besos de Sil, a

e decepción, de que

ían. Nunca me

pre lo hemos hecho de

ad. Disfrutamos el m

darme lo sufciente

Era como otras v

uria que desgarra, di

nte

Traté de alejarlo

ens

perando, mi amor

or eso no podía d

unca sucedió que nadie

é un poco más. Busqué los

ocura completa se apo

de algo diferente. De

o, no innovaba, no

que fuera algo más

ndose, lo empuj

ron, corriendo h

hombre vestido de ne

cabeza, estaba inmóv

nmóviles. Por un

ero no estaba seguro de ha

eliz vida. Enderecé el

o lo mismo con su traje

bre entró sin dec

i un “hol

cuenta, al igual que Sil,

ente veí

dici

EG

e quité las gafas y e

continuaba caminando. Ha

rmal. El último VIP

de usar traje

más gruesa, de colores o

que al menos el color n

de mi nu

pelo, la sensa

er del ascensor estaba

masiado impresionado? Er

Una mirada llamativa,

rdo haber visto nunca u

Pelo corto que fuye

bil

rios mis años de

cuenta de que me estaba da

co, cliché. Uno de los

estaba en su compañí

que podía ver la in

r. Fue un shock mezclado co

de años de experien

sonas, sino también el alm

erida, c

en d

s se pusieron de p

a poca distancia del mostra

taron mi

- Respondió una de

mostrándose más at

eali

itó a un salud

renc

podemos

favor anunci

que es Greg

a y las miradas insi

nto por ocultar sus int

es, ignoré a la pelirr

ta de Silvia. Ese era e

ac

Emperador te está

erta a la

ecí, con mi atenci

egué a la habitación in

enó en

con la magnífca vi

transparentes, que

terior. Se podía ve

l, no me deslumbraba

inación por algo, p

o Giacomo levantó e

la mano a modo de s

tarde. - Conf

ntacto. — Siént

gracias y

Estamos deseando emp

e un trabajo de e

nsabi

onal más califcad

s mejores del país,

ando una carpeta al

y vi que era

oy a su entera

e uste

o se ha suavizado d

do tranquilo. Lo mi

parecía, medio ver

sorprendió, ni siquiera u

tipo de r

vea si tiene alguna

su mano y me permit

moda silla,

la

ro adelanto que todo

ina, estaba por comenzar a

ando agregó. “Es

urante veinticuatro

ofreciéndome una f

me sor

e la fotografía y mi

ión en mí, pero tra

ios

de costumbre, su voz

dureza que no coinci

baba de darle. '

mi ausencia. ' ¡Ab

madas, visitas a casa

so, lugar diferente

plemente hizo una reveren

egas a sospecha

informarte sobre l

momento. Pero en r

fcial. Sentí mis músculos

ra una responsabilid

con tanta información

a un guardaespald

la foto, la deslumbrant

vera: la más hermosa de

e las m

ás. Franco se

riendo mi atención. —

máximo. en el ext

stés de servicio, c

es muy hermosa. Ni q

tipo de intimi