tas con euforia. Él también pensaba que cada función era di

os niños que participaban en la función,

alió disparado de la carpa hacía el pequeño patio ambient

gente-Exclamó Crista

Circo nuevo-Le respondió Aaron, que tenía los brazos cruzados sobre su p

estros fuegos artificiales. Además, es como cualquier cosa

ó pensando en el, y también en Heben, pues, él era nuevo y le había atr

ara con su pensamiento

que aquello no estab

mista del aire se había convertido en desper

ionó y mir

ar como una tonta distraída frente a su compañera la perfeccionista, pero no tenía de otra, pues ya

l tan oscuro como la noche, con pequeñas pintas de cristales blancos como las estrellas y su cabello es

ilar lanzando cristales de hielo de un cuenco que

el Circo Rosae Crucis, lo escuchaba sin ningún problema. Sin embargo,

aquella voz que escuchaba a lo lejos y decidió acercar

Aaron. Se sorprendió cuando Crista comenzó a congelar todo a su paso, dándole forma de animales al hielo. Los niños la miraban embelesad

ectáculo de la tarde. Solo se le acercó, y Crista retrocedió

Los dos hacían espirales de sus poderes por separados y luego las

icolor. Aeris, esparció con sus ráfagas el fuego y el hielo, dejando s

euer y Crista se abrazaron mirándose fijame

ían besado. Pero, al instante, se reprochó aquel p

evantó y comen

desde hacía rato, cuando notó su presencia

te quedas hasta

lo nocturno, iluminando los árboles altos y milenarios, las montañ

tió una gran calidez que nunca había sentido antes. Se quedó parado por vari

alidad, a su realidad

es, la gran mayoría seguían desde hacía tiempo al Circo Couleurs. Pero, par

xplicación. Se había puesto los mismos jeans gastados del día anterior, junto con un buzo gris topo que adoraba al ser del triple d

los protagonistas del espectáculo que estaban

ién realizó un monólogo parecido al de Erd

oducción del espectáculo. Realizaban diversas piruetas y pantomimas, junto con diversos gases de

o, pero no pensaba que tuvieran que envidiarles nada. Más bien

no solo atraía a los niños, sino también, a los adultos que los acompañaban. Pues, la seriedad de H

notar aquel encanto natural que el poseía. Al momento, comenzó

ijo a ella misma sin preocupars

fueron abiertas y las aves volaron hacía una gran rendija abierta en el tech

presencia de Idra sobre el escenario. Ella llevaba su cabello rojo atado en dos

a presentándose. Luego, les sonrió y varios tr

aparecieron varios símbolos de color rojo con diversas insignias en varios idiomas. Se escuchó el ruido de varias des

era comenzaron a caer al piso, y ovacionaron cuando

ellos símbolos y cayó en la cuenta de que Idra ignoraba la parte buena de la alquimia. Ya que, aquella chica no transformaba, sino que destruía. O

salieron a escena y saludaron al

staba sentada en una hermosa silla de roble tallado. Tenía la apariencia de una Reina sentada

de aliento de Griselda tenían un doble sentido. Pues no le

su logro y reconocimiento. Y lo ha