*recu

es luego también me enteré que no lo era, él había matado a mi verdadero padre y raptado a mi madre junto conmigo. La pobre debe haber sufrido mucho, primero le matan al marid

colegio, no tenía permitido tener amigos, ni hablar de ir a

ablar con él. Pero recordaba bien su cara, y sobre todo su perfume, desde aquella noche en la que me trajo. La calidez de su cuerpo y la suavidad de sus brazos cargándome, era de lo que más me acordaba. Cuand

así poder hacerme caso, algún día, de las empresas que el viejo Paolo decía que me pertenecían, pero en lugar de eso tuve que vestirme, pues mi Institutriz me avisó que

s estado?, más allá que

racias,

es de que me muer

sincera, lo

stidad, eso lo her

la recuerdo, y creo qu

mí po

edica, seguramente nadie nos hubi

amos hacer para que eso cambie, así que lo mejo

ue viene iré a la Universidad y luego me gusta

eso, es que he

emblante, la sangre se me heló, pues sabía qu

e que cambió de

é de opinión, hay

– pregunté desconfiada -

ate que te he mantenido

a salvo a este cauti

os enemigos han cambiado, pues muchos han muerto, hombre de palabra, y en sus lugares

quiere dec

te manejes sola, co

qué

lguien que

ondrá u

eso, te da

caso se ha vuelto loco?,

us empresas, te casarán en qu

ede hace

que puedo

en se supone

on

decía el viejo. Su nombre retumbó en mi cabeza y pareció esta

*recu

que ella fuera capaz de hacerse cargo y, por primera vez, pudiera empezar una vida independiente. Alicia, por lo que tenía entendido por su institutriz y por el propio Don Paolo, se había convertido en una jovencita muy madura. Yo no la había vuelto a ver, bueno, en realidad la vi un par de veces, pero muy de lejo

que sorpresa,

e es un placer

nmigo, siempre decía que era el hijo que nunca había tenid

– soltándome de su abrazo y dirigiéndome a mi

fé esta

le pedí a mi secretaria que traje

excusa para veni

in avisar es una novedad y me hace pensar que es

afé – si fuera posible me gustaría que me dedicar

e el cerrojo a la puerta, así como puse

suplentes en todos los negocios, si bien una parte será de Alicia, tú lo manej

ya sabe que le debo más que la vida y e

más que una orden, es u

ada vez me intri

abezas de las familias están muriendo,

sé mu

enen el sentimiento

bién

n con ellos empieza a perd

or ella, creí que había que

para que la puedas seguir

café que tenía en la boca – Con todo res

l error con mi hija, que dejé que se casara con un médico y viviera lejos de mí una vida supuestamen

e evitar el tartamu

espondió

ella cree que maté a su padre, aunque luego se haya enterado de que en realidad no lo era, la arrebaté de su ca

comprendas también – esperó que le dijera algo, pero yo me mantenía mudo – ya hable con el abogado y preparará los papeles. Eso sí, la boda será l