i quieres que me detenga, si estoy si

hecho a la bestia que conocí»

n poco más rápido y duro, así por minutos por no decir más,

e iría unos minutos más tarde, me dijo al oído q

es, me dio un beso en la frente, estaba feliz, eso se sentía maravilloso, me sentía a salvo allí, aun cuando él era la best

ro moverse, mire y parecía estar recobrando vida, v

, pensé que se había ido, pero escuc

labios. Me vio cuando lo espiaba y me invitó a ducharme

me proporcionaba me hacía olvidar la bestia que era,

se sentía, pero allí estaba en el sofá, parecí

nunca saldr

avar bien, me d

lidades, Oye, espero que me hayas perdonado lo de la otra noche, de verdad lo sie

ieras, te amo» pensó mi l

donó, si me prometes que

estaruda, me llevas la contraria y que no te doblegas ante mí, tan fácil como lo hacían las otras. Eres muy h

Despedí c

e había dado, que estaba tan feliz y de tan buen humor, las chicas felices

se había vuelto otro, más cariñoso, me trataba mejor, al igua

jo que no la conocía bien. Así que lo puse al tanto, dijo

orpresa. Le dije que saldría a comprar, invite a Betsy, pero seguía molesta, así que

vo, más tarde hablamos. Y me reclamó así, supe cuál era la ra

didos, él me trataba diferente a como había sido con las otr

caba que podría existir la posibilidad de remplazarme, había un profesor nuevo, la razón de su moles

cuando tenía todo listo, para organizar lo de su cumpleaños, fui a

que eso, lo sabes ¿Preguntas eso por qué te inte

to por qué quiero estar segura

amos hacer el amor en su oficina, e

no tengo yo?! ¡Carajos! ¿Qu

¿Yo soy la acompañante

do todo juicio de quien solía ser,

tras así y de quién

mismo de mi oficina, es una o

quieres que me quede a explicar que es

vor explicarme. ¿Que pasa

e, yo te explico lo que está

iato Betsy. —orde

estuve a su lado. Si le di todo de mí me entregué y sabes lo que hizo, me remplazo como lo hará contigo —afirmo Betsy molesta.—¿te sientes feliz y enamorada? Pues eso acabará porq

hablando? —pr

? Pues no lo eres, te dejará igua

e conocía, no lo entiendo, Hade

dicho es justo lo que hacía cuando sentía que había perdido el control sobre mí, comprarme regalos y tratarme bonito, sabes que, apuesto a que también lo hacía

rá todo lo que se te debe, lárgate ya— ordenó —tú no, Zia no te vaya