y se dio cuenta, cuanto más le pedía d

ando, intenté quitármelo de encima en muchas ocasiones. Era demasiado fuerte, no le importaba en lo m

vo, se bajó de encima de mí. Se vistió y se marchó de la habitaci

lastimada, no pude bañarme bien, me dolía, era

allí, no sabía si él volvería tome mis cosas, intente salir, pe

me metí a la cama, no recuerd

y me apresure a ir a mi habitación, al llegar allí las chicas no estaban, había un

pensar en lo mucho que lo odiaba, era un maldito infeliz, com

ue le molestaban, quizás si cuando me tocará bailar le coqueteaba a otros hombres o quizás s

que solo hiciera su trabajo, me dio un vestido y me maquillo, me pidió que fuera con ella, me dirigió a u

stigo te sentó bien. No te preocupes, ya entendiste la lección, esta noche te daré eso especial que quier

s me hacía espacio para sentarme. Esa n

este infeliz» pensé, el show hab

ando estaba disfrutando d

ume me dan ganas de hacerte mía de nuevo, lo cual pasará en unas horas, te aviso para q

ta —m

ariciar mi pierna. Ágilmente con mi mano tire la suya, lo mire con od

a gente de aquí y te haría mía justo aquí, justo ahora. ¿Sí, sabes eso verdad? Que me mires así y que

e, el muy infeliz no parecía tene

s el vestido y me esperas en ropa interior en la cama. Y por favor

nsé dejando notar mi

ero ir ahora —dije—. Tod

as 12:15 am, es una orden y no

s, las horas y no había regresado, al no estar en su presenc

do, lo cual me había alegrado. Hasta el momento en que me di cuenta de que tenía el tiempo justo para ir a la

el maquillaje, justo cuando se dieron l

nsando cuando de repente entro, parecía satisfacerle mucho verme allí, baje la

aca un condón, se posa en frente de la cama, lo abri

chos, deja caer saliva en ellos y jue

crecer y hacerse grande y grueso, lo suficiente como para el pon

de haberme quitado de manera desagradable lo que puedo ser mi más bonito recu