anotaciones en algunas de ellas. Sabía que había cosas que debía respetar, como el he

io baño, así que se ducha antes de dormir. Un mensaje e

_ 11:

s des

la cabeza y la misma ropa que traía sale

rte en voz alta a

viene desde una habitación. La puerta de esta se abre y

cuerpo. Unos bíceps y vientre bien trabajados son algunas de las cosas de las que se da c

ando que se acaba de bañar y que sus pezones erectos

rada de él y pone los braz

mina detrás de ella mirando su delgado cuerpo e imaginándosela desnuda—. Toma, espero que considere

asará por ti —indica él sin mirarla, su vista yace sobre los papeles que ella rec

tocando un panel y este se abre deja

ver tal tamaño de guardarropa—. Es todo tuyo, iremos comprando lo que necesite

, pero se mantiene a raya. Él sale de la habitación sin esperar, pero antes que cruce la puerta logra escuchar un “B

nderá, Ayden comprueba con su padre la cita de esa noche, ambos

e apretando la mandíbula—. M

de inmediato e intent

de ni probar bocado, ¿y si tu padre nos descubre? —pre

ente de la doctora interrumpiendo

saliñada. A pesar de que se ha puesto unos jeans que se ajustan a sus casi inexistentes c

complexión atlética pero esbelta, así como su carácter y su belleza. Era un

expediente clínico recibido de Arya—. Veo que el procedi

ntregado al área legal —Ayden extiende una carpeta frente a la doctora

a doctora les indica el tratamiento y revisa el estado físico de Arya, luego de ha

a, dado que tu menstruación está por llegar, te inyectaremos este medicamento que hará que tus óvulos sean mejor receptores. Y en tu caso, Ayden, tomarás estas hormonas

ard —dice Arya poniénd

gradecimientos y alcanza a la

—pregunta al

toy bien —miente y aunque é

go? —pregunta por

a lo que sea que h

él y recuerda q

erta del chofer—. Tengo que contarte alguna

ella detrás del volante. Enciende e

—explica sin dejar de poner atención en las calles—. Sin embargo, mi hermano de un

de tu familia? —pregunta

quiere quedarse con el área farmacéutica, planea dividir la empresa —expone Ayden apretando el volante—. Mi padre le ha dicho que no tiene hijos, ni u

in escrúpulos y un padre chantajista y manipulador, no

momento siente que la vida ha sido demasiado larga. Tan solo

saber? —pregunta él siendo

a y postr

… la crema de cacahuate. Pero mi postr

n s

é ti

cho el sushi y de postre, las fresas con crema…

n de Arya. Ella se asombra de verlo tan relajado, pues nunca

ara ir a la cena. Arya se pone un vestido de escote en v con volantes de color negro, se hace unos cuantos rizos en el pelo para

ima» piensa

alta y ella asiente con un

apuesto millonario baja para abrirle la puerta a ella tal como lo propusieron. A pesar de su reticencia

lectricidad pasando por su piel y el roce de cada movi

laneamos —repite Ayd

esperar a que su ama de llaves abriera para

al abrir la puerta—. Pasen, t

os se suelta de la mano para que el

unca esperé que este momento llegara —dice

menta aun cuando sabe que no es así, solo le ha dicho lo esenc

a cajita de madera con

nos —advierte llevándose uno a las nar

rtesía en su padre se hace presente por encima de sus verdaderas inten

, soy Mark —saluda

a y se asegura de que no se note que ha q

ue busca el contacto de la

ntiende cómo es que por un momento puede ser todo un hombre atento y hasta galante y al siguiente se limpia la mano del contacto con ell

Tinto, blanco o rosado? —pregunta

regresando al lado de la jov

nador y controlar a tu pareja? —pr

ntestar cuando el

e—. Solo que… —Arya lleva su mano izquierda al vientre

or sorpresa, la de Mark por qué sintió como sus esfuerzos por quedarse con la compañía s

nto el anciano y camina hasta

lo abraza, Ayden ret

ce a su primogénito—. Vengan, vamos a

e cree sus palabras, pero Ayden no. Luego que este camina tras

etados y luego la toma del brazo—. Cuando llegu

voz baja—. No tienes que to

es políticos. Mientras tanto Ayden siente el cosquilleo en su mano, aunqu

a verdad sobre él, no