Traicionada

ól

Noah F

ndoza ha terminado, ya fueron presentadas todas las ev

jurado, lo tenemos prácticamente ganado, dejando a un idiota infiel más, sin nada en el bolsillo. Pero el hecho de que Nata

s, ya que ambos son miembros públicos en

e vida durante la jornada laboral, y es que ser el director y dueño de un gran porcentaje de este bufete de abogados, no está nad

me han brindado apoyo y con la señora Mendoza, quien esperemos desde mañana pueda lib

Irina, mi segunda a mando, y yo, diremos ante el gran jura

tas que Natalie siempre toma por mí, para ten

tra vez, hasta que

fascinado con su oratoria y la forma tan extraordinaria

í y yo el hombre perfecto para ella, pero simplemente, na

a pobre asistente de piso toca mi puerta y creo que el hecho de haberle encargad

sonrisa-, me costó, pero aquí está el curric

una reunión, es algo extraoficial. Mis padres

zo a revolver el desastre que tengo en mi escritorio, hasta conseguirlos, es sorprendente el desastre que puedo hacer sin Natalie en

es y yo salgo del despacho hacia los ascens

tras que yo frunzo el ceño, enterándome por ella que es

é que sería algo

una pequeñ

rio número cincuenta de tus padres?

mos hasta el estacionamiento, nos de

mi penthouse, yo podría vivir en la gran casa de mis padres aún y no estar tan so

ue tengo pocos minutos para llegar al restauran

lo color gris claro, me doy un último vistazo al espejo y

dad de decir mi nombre para que me ubiquen, porque me doy cuenta, que todos los presentes, son conocidos por mí, cosa que qui

me siento tranquilo, si ell

mi madre me recibe

ra acercarme más a ella y por más que quie

ucho la voz de mi hermana

razo y la toma ella

terías que los

o porque tengo a mi hermanita pequeña frente a mí

go desde que era pequeña, que sé que tanto le mo

esta con el apodo pero en e

mamá se enfermó, decidió venir a terminar su carrera en derecho aquí, en Estados Unidos. Hace

brindis, risas y hala

ellos no puedo negarme. Subo a una

ue a pesar de que me dieron una hermana molesta, que no pedí -observo a Marie sacarme el dedo del medio sin ningún pudor-, ustedes dos son mi ejemplo de amor verdadero -veo como mi padre abraza a

la mujer que viene vestida con un vestido negro ceñido al cuerpo, entra con paso seguro, mientras su cabello largo y rojizo va de un lado a otro, mi vista se

, pero mientras nos miramos, es

per el momento y ella desvía la mirada, sonri

arme en el final del discurso que ni siquiera

dos alzan sus copas y toman y yo me bajo de la tarima, tratando

sí la lla

que me agradecen el discurso con un

l impulso de salir del lugar para alcanzarlas, me gana.

ninguna de las dos. Nunca en mi vida, había sentido esa conexión con ninguna persona,

e quedo tranquilo sabiendo, que si es una de sus amigas

mportante mañana, decido despedirme tempran

o en la cama listo para dormir y apenas mis

ordarme a mí mismo, pero ¿A quién quiero eng

tar con sueño el día de mañana, o llegar con cara de t

.

, corro hasta la ducha y me arreglo en menos de diez minutos, tomo solo fru

ero, lo pongo en altavoz y respondo mie

el gusto? -siempre trato de ser amable, aunque odi

lo asistirá en día de hoy en el juicio -habla una voz dulce pero que suena fir

r todo, pero no era necesario la llamada, ya estoy a dos

rando al estacionamiento y me ubic

o entre la pequeña multitud, subiendo las escaleras pa

pendiente de la contraparte. Trato de ponerle rostro a la voz que me llamó hace unos minutos y sorprendentemente no encuentro a

Comenzamos con mal p

oy para lo que necesite -

para y enfatiza las palabras p

n palabras, la dueña de esa mirada que me dejó idiotizado anoche

erson» lin

uestra representada hace aparición, lla

os avanzamos y yo trato de disimular la frustración q

primera en pasar a dar los argumentos es Irina. Esa fue nuestra estrategia, tocar el lado sensible del jurado primero, hablando de lo buena madre y

ir voltear a ver a la chica que está detrás de mí. Esta mordisqueando la punta de un bolígraf

ara mostrar ciertas evidencias, porque yo no vine a jugar ni perder, yo vine con la artillería pesada. Mi vis

! Cálmate» me r

ológicos, no sólo a ella, sino a los niños que ambos comparten y mi mente vuelve a quedar en blanco cuando

siera probar

dar mis alegatos final

pero siento que mueven mi silla en un vaivén desesperante.

veo como ella y

mpleto, me parece tan sensual, que si ella no se lo saca en este momento, soy capaz de rob

ro hoy me siento más tens

al jurado para deliberar y nos dicen qu

uiero disculparme y la veo guardar las cosas sin siquiera prestarme atención, camina fuera de la

o y ella voltea, la mirada se le i

ar hacia mi emocionada mientras que un hombre rubio pasa por mi lado, tropezando mi hombro y veo como llega hast

risa era por mí, cuando yo solo soy un simple desconocido para

o estúpido que sinti

ige a mí-, le quiero present

aludo. Se me queda viendo serio, pensando q

dole la mirada y el

go que usted es el jefe de mi prometida? -vuelvo a asen

y ahí esta. El anillo que mi ceguera mome

ra hacerlo, que siento una conexión real con alguien, de esas de las que siempre hablan las personas c

a sea m