jan

ucha fe y ganas de salir adelante. Acababa de perder a un bebé y me sentía horrible tanto física como psicológ

Le dije al taxista despué

—Me respondió el señor vi

sión. Cerré la puerta y al voltear, me encontré con la due

Me pregunto ace

y decepcionada de la vida, pero también con m

s detalles. —Me dijo estirando su mano para que yo la agarrara y eso

as en un sofá que estaba junto a la puerta y me senté con bastante delicadeza en una silla de la mesa del comedor. Me quede un rato observando a la señora Mart

to con una ligera ca

tras dirigía mi mirada hacia otro luga

a era obvio que no había quedado satisfe

, ya quisiera yo que la mía fuese como usted. Pero como siempre digo, algunos

as al mismo tiempo ponía las dos tazas de té en la mesa, c

abajar, ya que mi madre se enfermó y le era imposible salir a la calle. Yo trabajaba en supermercados embolsando los mercados de las demás personas. A los

—Le respond

irme y de dejar a mis hijos con él, pero sabía que los maltrataría muchísimo y les diría que por culpa de ellos fue que yo me fui. Hice un gran sacrificio por mis h

quisiéramos que alguien se sacrificara tanto por nosotros. Estoy segura de que sus hijos están muy orgu

y repartirse el dinero. Ninguno de ellos ha valorado mis esfuerzos del pasado y ninguno de mis hijos son

e a otro lugar y así ellos ya no van a estar pendientes del dinero. —Le

ría cuervos y te sacaran los ojos”. —Me respondió y al instante se me erizó la piel, Ma

piensa que todo tiene una solución. —Le respondí intentan

a ido el día que tuve la oportunidad, no me importaría haberlos dejado con el ogro de mi exmarido. A estas alturas de la vida es que te empiezas a dar cuenta de todos l

o dice? —Le

yudar a los demás y para vivir tu vida y para ayudarte a ti misma. Y recuerda algo, nadie te ayuda de gratis, las personas