/0/16303/coverbig.jpg?v=c539d790f37d4ab04c97cabf4e8e200a)
Santiago Arriaga, un CEO implacable y sin debilidades, esconde un secreto que nadie sospecha: está casado. Hace cinco años, por circunstancias inesperadas, se casó con Camila, una mujer que no pertenece a su mundo de poder y riqueza. Aunque su matrimonio fue solo un acuerdo para resolver un problema legal, Camila se convirtió en su refugio, su escape del caos de su vida. Sin embargo, cuando Santiago se ve obligado a comprometerse con la heredera de otra familia para cerrar un trato millonario, Camila se harta de ser su sombra. Está lista para irse, pero Santiago se da cuenta de algo demasiado tarde: no puede dejarla ir. Ahora, deberá elegir entre proteger su imperio o luchar por la mujer que nunca quiso admitir que amaba.
El sonido del agua hirviendo en la tetera llenaba la pequeña cocina, rompiendo el silencio de la madrugada. Natalia Fuentes se pasó una mano por la frente, apartando un mechón de cabello rebelde mientras servía el té en una taza de porcelana desgastada. Afuera, la ciudad nunca dormía, pero dentro de aquel modesto apartamento, todo estaba sumido en una calma que contrastaba con el torbellino de pensamientos que la consumía.
Cinco años.
Cinco años siendo la esposa de Emiliano Vélez. Cinco años viviendo en la sombra de un hombre que, de puertas para afuera, era el CEO más poderoso del país, un hombre al que todos temían y respetaban. Pero en casa, con ella, era diferente. No era el hombre frío e implacable que los medios retrataban. Con Natalia, se permitía ser simplemente Emiliano, un hombre que, aunque distante y pragmático, encontraba en ella un refugio que no podía encontrar en ninguna otra parte.
Pero Natalia estaba cansada.
El matrimonio entre ellos nunca había sido convencional. No hubo una boda de ensueño, ni un anillo que simbolizara amor eterno. Se casaron en una oficina del registro civil, con solo un par de firmas y un acuerdo silencioso: él necesitaba casarse para resolver un problema legal y ella, en aquel entonces, solo quería estabilidad.
Al principio, se conformó con la vida que tenía a su lado. No esperaba promesas de amor ni noches románticas. Se acostumbró a verlo entrar y salir de casa a horas imposibles, a la manera en que la miraba con una mezcla de posesión y desapego. Pero el problema era que, con el tiempo, su corazón había decidido no seguir las reglas del acuerdo. Se había enamorado de él, sin remedio y sin retorno.
Y ahora, cinco años después, Emiliano estaba a punto de anunciar su compromiso con otra mujer.
El té en sus manos se enfrió mientras sus pensamientos la atormentaban. La noticia no la había sorprendido del todo. Siempre supo que su matrimonio con él era temporal, que tarde o temprano él haría lo que era mejor para su imperio. Pero lo que sí la sorprendió fue el dolor punzante en su pecho cuando leyó los titulares.
"El CEO de Vélez Enterprises, Emiliano Vélez, podría estar en negociaciones de compromiso con la heredera de la familia Lombardi."
La familia Lombardi. Antiguos aliados y rivales de Emiliano en el mundo empresarial. Un matrimonio con Luciana Lombardi consolidaría un imperio que ninguna otra empresa podría desafiar.
Natalia soltó un suspiro tembloroso. Ya no podía seguir así.
Se levantó de la mesa y caminó hacia la habitación. Sobre la cómoda, un par de maletas esperaban, listas desde la noche anterior. No quería quedarse ni un día más en ese apartamento, esperando migajas de un hombre que, en unas semanas, estaría anunciando su nuevo compromiso al mundo.
Pero justo cuando se disponía a tomar las maletas, la puerta principal se abrió de golpe.
El sonido de las llaves chocando contra la mesa de entrada le dijo quién era antes de que tuviera que volverse.
-¿Dónde vas? -la voz de Emiliano retumbó en el espacio, profunda y cargada de autoridad.
Natalia cerró los ojos por un segundo antes de girarse lentamente para encararlo.
Él estaba ahí, de pie en la entrada, con su traje aún impecable pese a la larga jornada. Su cabello negro estaba ligeramente despeinado, como si hubiera pasado los dedos por él demasiadas veces en el camino a casa. Sus ojos grises, siempre fríos e inescrutables, la observaban con intensidad.
-Me voy -respondió ella con calma.
Él entrecerró los ojos. Dio un paso al frente y, con la facilidad de un depredador que sabe que su presa no tiene escapatoria, acortó la distancia entre ellos.
-No. No te vas.
Natalia tragó saliva, pero se obligó a mantenerse firme.
-Nuestro matrimonio nunca significó nada para ti -su voz no tembló, aunque su corazón latía con fuerza-. Ahora tienes lo que siempre quisiste. Puedes casarte con Luciana Lombardi y fortalecer tu imperio. No tienes por qué seguir atado a mí.
Emiliano no respondió de inmediato. Sus ojos recorrieron su rostro, buscando algo, quizás esperando una mentira en sus palabras.
Finalmente, habló en voz baja, como si estuviera haciendo una confesión que él mismo no quería admitir.
-Tú eres mi esposa.
Natalia dejó escapar una risa amarga.
-¿Desde cuándo te ha importado lo que eso significa?
Él avanzó otro paso. La proximidad entre ellos hizo que el aire se volviera denso. Natalia podía percibir su fragancia, el mismo aroma que se había impregnado en sus sábanas durante años.
-No me voy a casar con Luciana Lombardi -su tono fue bajo, pero firme.
Ella frunció el ceño.
-Eso no cambia nada, Emiliano.
Él se quedó en silencio por unos segundos antes de inclinarse levemente hacia ella, su rostro lo suficientemente cerca como para que Natalia pudiera ver cada sombra en sus ojos.
-Cambia todo.
Natalia sintió su resolución tambalearse, pero no podía permitirse flaquear. No esta vez.
-Ya tomé mi decisión -dijo en voz baja.
El rostro de Emiliano se endureció. Sus manos se cerraron en puños a los costados de su cuerpo, conteniéndose.
-No te dejaré ir.
El eco de sus palabras quedó suspendido entre ellos. Natalia sintió un escalofrío recorrer su espalda.
Porque, por primera vez en cinco años, supo que Emiliano Vélez no iba a permitir que se alejara de él.
Y, aunque nunca lo había admitido, quizás eso era lo que más había temido desde el principio.
Valentina Ríos creyó haberlo perdido todo: su matrimonio, su bebé... y su dignidad. Después de un doloroso divorcio con Alejandro De la Vega -el implacable CEO que alguna vez amó-, desapareció del mapa tras un diagnóstico devastador. Pero el destino tenía otros planes. Cinco años después, Alejandro vive atormentado por el fantasma de su exesposa, a quien cree muerta tras un accidente. Hasta que, en un giro inesperado, ve el rostro de un niño idéntico al suyo en una revista internacional. La verdad lo sacude: Valentina está viva... y no se fue sola. Ahora, enfrentados por el pasado, unidos por un hijo y atrapados en una batalla legal y emocional, ambos deberán decidir si pueden sanar las heridas o si el orgullo y los secretos terminarán por destruirlos del todo. Una historia de amor perdido, mentiras ocultas y segundas oportunidades que podría cambiarlo todo... si el corazón sobrevive.
Valentina llevaba una vida profesional estable como gerente de marketing en una empresa tranquila, con rutinas previsibles y cero dramas... hasta que todo cambia. El nuevo CEO de la compañía no es un desconocido: es Nicolás, su exnovio de la universidad, el hombre al que dejó años atrás para perseguir sus sueños profesionales en otro país. Ahora, Nicolás vuelve más exitoso, carismático y poderoso que nunca... pero también con una clara misión: poner a prueba a Valentina, demostrar que ya no la necesita... ¿o tal vez todo lo contrario? Entre reuniones tensas, miradas que arden y recuerdos del pasado que no terminan de morir, ambos deberán enfrentar lo que aún queda entre ellos. Porque en los negocios puede haber reglas... pero en el amor, todo se vale.
Alejandro Rodríguez es un CEO de una exitosa cadena de hoteles de lujo, conocido por su carisma y su habilidad para manipular el mercado a su favor. Sin embargo, tras el suicidio de uno de sus empleados más cercanos, comienza a recibir mensajes anónimos que lo acusan de un oscuro secreto relacionado con el pasado de la empresa. A medida que profundiza en la investigación, se da cuenta de que alguien dentro de su círculo cercano está jugando un juego peligroso, y podría costarle no solo su carrera, sino su vida.
Alma Serrano es una mujer que lo tiene todo: es la CEO de Seré, una de las casas de moda más influyentes de Latinoamérica. Visionaria, elegante y ferozmente independiente, ha construido su imperio desde cero. En el mundo de los negocios, nadie se atreve a subestimarla. En casa, comparte su vida con Tomás, su esposo, un hombre cálido, discreto y encantador que ha renunciado a su carrera para ser su apoyo incondicional, manejando el hogar con ternura y devoción. Pero lo que Alma no sabe es que Tomás es en realidad Leonel Duarte, CEO en las sombras de Theia Corp, una marca de moda emergente y agresiva que, bajo su liderazgo secreto, ha comenzado a arrebatar mercado a grandes firmas... incluida Seré. Lo que comenzó como una estrategia corporativa –acercarse a Alma para espiarla desde dentro– se complicó cuando se enamoró de verdad. Ahora, atrapado entre su amor genuino por Alma y los secretos que podrían destruirla, Tomás/Leonel se ve forzado a jugar un juego peligroso. Su doble vida se tambalea cuando Alma comienza a investigar la identidad del misterioso CEO de Theia Corp, sin saber que duerme a su lado cada noche. ¿Cuánto puede ocultarse la verdad antes de volverse insoportable? ¿Puede el amor sobrevivir a una traición construida con silencios?
Oliver Montenegro, un CEO millonario y homosexual, está en una encrucijada: su familia tradicionalista y los inversionistas de su empresa insisten en que debe casarse para mantener las apariencias. En medio de la presión, su mejor amiga, Julia, le propone una solución inesperada: casarse con él a cambio de una vida llena de lujos y la libertad de seguir con su propia vida. El plan parece perfecto hasta que la prensa, los accionistas y la familia de Oliver empiezan a sospechar. Para aparentar ser un matrimonio real, deben actuar como una pareja enamorada en público, lo que los lleva a situaciones cada vez más complicadas. Sin embargo, lo que ninguno de los dos esperaba era que fingir amor despertara sentimientos inesperados, celos y secretos que podrían cambiarlo todo.
Después de un accidente que la deja con amnesia, una mujer embarazada de quintillizos se encuentra con un CEO poderoso que asegura ser su esposo. Pero la verdad es que él solo quiere protegerla de su pasado... y ha jurado que, cuando recuerde la verdad, la hará suya de verdad
Brit Su, una chica con un gran objetivo en su vida: conocer a sus padres biológicos y la razón por la cual la abandonaron. Ella es trabajadora, soñadora y su pasión es ayudar a los demás, se embarca en un viaje a Shanghai su tierra natal para realizar unos proyectos En el transcurso de su viaje se encuentra con Daniel Ye, un joven CEO que ve la vida en blanco y negro, el cual no cree en el amor, pero en cuanto ve a Brit queda en un estado complicado que ni él sabe si es atraccion o amor. ella lo hará ver la vida de otra manera y colores. Lo de más lo tendréis que descubrir.....
Sólo había un hombre en el corazón de Raegan: Mitchel. Tras dos años de matrimonio quedó embarazada. Raegan se sintió muy feliz. Pero antes de que ella pudiera darle la noticia, él solicitó el divorcio porque quería casarse con su primer amor. Más tarde, Raegan tuvo un accidente y, tumbada en un charco de su propia sangre, le pidió ayuda a Mitchel. Sin embargo, se fue con su primer amor en brazos. Afortunadamente, Raegan escapó por poco de la muerte y decidió retomar su vida. Años después, se hizo famosa en casi todo el mundo. Después del divorcio, Mitchel se sintió muy incómodo. Por alguna razón, empezó a extrañarla. Le dolió el corazón cuando la vio sonreírle a otro hombre. En la ceremonia de su boda, él irrumpió y se arrodilló. Con los ojos rojos, preguntó: "¿No dijiste que tu amor por mí era inquebrantable? ¿Por qué te casas con otro hombre? ¡Vuelve a mí!".
Charles tenía novias diferentes cada día del año, nunca salía con la misma chica. Su nombre había sido vinculado a innumerables mujeres. Autumn, por su parte, se vio obligada a casarse con Charles sustituyendo a su hermana, quien se había escapado. Su único deseo era divorciarse después de un año. Ninguno de los dos había esperado que se enamoraran el uno del otro. Tampoco esperaban que el mundo entero los desafiara. Una ex novia quien causa problemas cada dos por tres. Una hermana fugitiva quien regresa con la intención de recuperar a Charles. Una suegra que siempre se entromete en sus momentos íntimos. ¿Te gustaría leer más? ¡No dudes! ¡Vamos allá!
"Tú no perteneces aquí. Lárgate". Hanna, la hija legítima de Wheeler, regresó sólo para ser expulsada por su familia. Su prometido la engañaba con la hija impostora, sus hermanos la despreciaban y su padre la ignoraba. Entonces, se cruzó con Chris, el formidable líder de la familia Willis y tío de su prometido. "Hagamos como si nunca hubiera pasado", dijo ella. Sin embargo, a pesar de la esperanza de Hanna de separarse, Chris insistió en que fuera responsable. Él amenazó con revelar los verdaderos talentos de Hanna como doctora sobresaliente, guionista brillante y cerebro de un famoso estudio de diseño, obligándola a casarse. Una vez le pidieron a Chris que protegiera a alguien. El destino los reunió en circunstancias delicadas. Él había planeado mantener su promesa y proporcionar un refugio seguro, sólo para descubrir que Hanna estaba lejos de ser la delicada mujer que parecía. Era ingeniosa y astuta...
El día de su aniversario de boda, la amante de Joshua drogó a Alicia, que acabó en la cama de un desconocido. En una noche, Alicia perdió su inocencia, mientras la amante de Joshua llevaba a su hijo en el vientre. Desconsolada y humillada, Alicia pidió el divorcio, pero Joshua lo consideró una rabieta más. Cuando finalmente se separaron, ella se convirtió en una artista de renombre, admirada por todos. Consumido por el remordimiento, Joshua se acercó a su puerta con la esperanza de reconciliarse, solo para encontrarla en brazos de un poderoso magnate. "Saluda a tu cuñada", dijo este.
Durante tres años, Shane e Yvonne estuvieron casados, compartiendo noches acaloradas, mientras él aún estaba enamorado de su primer amor. Yvonne se esforzaba por ser una esposa obediente, pero su matrimonio se sentía vacío, construido sobre el deseo más que sobre el verdadero afecto. Todo cambió cuando se quedó embarazada, sólo para que Shane la empujara a la mesa de operaciones, advirtiéndole: "¡O sobrevives tú o el bebé!". Destrozada por su crueldad, Yvonne desapareció apesadumbrada y más tarde regresó, radiante de plenitud, dejando a todos boquiabiertos. Atormentado por los remordimientos, Shane le suplicó otra oportunidad, pero Yvonne sólo sonrió y respondió: "Lo siento, los hombres ya no me interesan".