Un regalo para nosotros

Emma Thomson su vida no había sido nada fácil, su familia era acomodada, pero ella no podía gozar de ese privilegio al 100% solo su hermana Yadira quien era dos años mayor que ella, su madre Carlota Jones, una mujer frívola, y fría para ella solo existía su hija Yadira, por la cual hacía todo lo posible por cumplir cada capricho, que la chica tenia, no sabían nada de su padre, él un día simplemente se fue, cuando Emma tenía 15 años, su madre les dijo que las dejo por irse con otra, dejándoles solo el pequeño negocio, pero Emma sabía muy bien que eso no era verdad, aunque aún no había podido lo

calizarlo, sabía que algo le había pasado ese día cuando ellos pelearon.

Emma, era una mujer muy lista, ella era una experta en la tecnología, pero esto nadie lo sabía, había estado oculta, solo su padre, sabía lo que ella era capaz de hacer, siempre la cuido, hasta cuando hizo algo ilegal, y el gobierno la buscaba para que trabajara para ellos.

Así Emma tuvo que aprender a aparentar ser una mujer sumisa, y tímida, aunque no lo fuera, su madre y hermana pensando que ella era débil abusaban de ella.

A Yadira nunca le había gustado Emma, siempre se sintió inferior, y tenía razón, Emma era una mujer hermosa su cabello rojo rizado, largo hasta su cintura, un cuerpo curvilíneo, y con un alma tan blanca, y libre.

Esto molestaba mucho a Yadira ella era guapa y hasta ahí, lo único que la hacía diferente a Emma era que Yadira, no era tan tímida como su hermana, a Emma no le interesaba tener una relación, con nadie.

Ambas trabajaban en el negocio familiar, una pequeña cadena de restaurantes, Yadira ocupaba el lugar de presidencia, y Emma era su asistente.

Pero Emma era quien, hacia todo el trabajo, Yadira no era tan inteligente como ella, pero ella creía que sí.

A sí que, preparo un buen regalo para su hermana en una semana Emma cumpliría 25 años, y Yadira le había organizado una reunión en un club privado, con esto ella quería que Emma desapareciera de su vida, como Carlota Miller era muy moralista, no permitiría ningún mal acto de sus hijas, al menos no de Emma ya que de las cosas de Yadira se hacía de la vista gorda.

"¿Lista hermanita?"

"Si, Yadira aún no estoy segura de ir, mañana tenemos junta con los socios a las 9:00 no quiero llegar desvelada o cansada”

"Vamos no llegaremos tarde solo unos pocos tragos y ya"

"Están bien" Yadira siempre había sido una buena hermana con Emma, pero ella era la causante de varios de los problemas que Emma había tenido.

Cuando llegaron al lugar, los amigos de Yadira ya estaban ahí, Emma no los conocía muy bien, pero fue amable al saludarlos.

"¿Bailamos?" Le dijo César uno de los amigos de su hermana.

"Bueno"

Pasaron unas horas bailando, hasta que ya no podían más, César llevó a Emma de nuevo a la mesa, y fue por dos tragos.

"Toma Emma, hace calor, con esto se te quitará"

"Gracias" Media hora después, Emma se empezó a sentir mareada, pero estaba consciente, rápidamente supo lo que le había pasado.

Se levantó del lugar tomo su bolsa y salió, de ahí, caminó hacia su auto, quería llegar y meterse en él, así cerraría los seguros y estaría a salvo, pero antes de que pudiera abrir la puerta alguien la jaló, y la arrastró hasta un lugar donde estaba oscuro el hombre comenzó a besarla, ella se defendía, pero nada podía hacer la droga estaba haciendo su efecto, cada vez se sentía más débil.

"¡Suéltame!" El hombre la tiro al suelo, con un golpe, haciendo que se golpeara en la frente con una pared que estaba cerca, se sintió mareada, mientras el hombre le arrancaba la ropa, Emma trataba de defenderse, escuchó el ruido del cierre del pantalón, Emma entró en pánico, pero sus fuerzas ya se habían acabado, el hombre solo separó un poco sus piernas y la penetró sin ningún reparo.

Emma dio un grito de dolor, a pesar de haber tomado algo de droga, sabía lo que estaba pasando, Emma lloraba no podía creer lo que le estaba pasando, sabía que todo era planeado por su querida hermana.

El hombre apretó sus senos, y se los mordió dejando moretones en ellos, cuando la agarró por la cadera la apretó tan fuerte que también dejo marcas, le dio unas cachetadas.

El hombre no la soltó hasta que se cansó de ella, Emma simplemente parecía una muñeca sin vida, sus lágrimas ya no salían, su mirada estibaba perdida, en su mente solo había una cosa…

El hombre se levantó, antes de irse le dio una patada a los costados, luego le dio una mirada, se acomodó la ropa y se fue de ahí. Dejándola en el suelo y sangrando.

Unos amigos iban saliendo del club, caminaron a su auto una de las chicas que iba con ellos vio un bulto y al encenderse las luces del auto, miraron a Emma tirada, golpeada y sin ropa.

"¡Julián!" La chica llamo a su novio el cual también ya había visto a Emma, las otras dos personas se acercaron también.

"¡Llama a una ambulancia!" Dijo Julián, quien fue el primero en llegar a dónde estaba Emma, la reviso, era médico y este día estaba de descanso.

Jazmín, su novia, corrió al auto y saco una manta, y con ella tapó un poco a Emma, más gente salió del club y miró lo que pasaba, nadie sabía la identidad de la mujer ya que tenía el cabello cubriendo su rostro, y tenía sangre en ella.

La ambulancia llegó en pocos minutos, Julián ayudo a sus compañeros a subirla a la camilla, también con la manta, cubrieron el cuerpo de Emma, tratando de que la gente no le viera la cara, pero Yadira llegó, gritando.

"¡Emma... Emma Thomson! ¡Ohm si eres tú! ¿Quién te violó?" había gritado el nombre de su hermana y lo que le había pasado, para terminar con su plan, si la gente no sabía quién era, no pasaría nada, en cambio así, todo saldría en las noticias, y si, la gente que miraba grababa con sus celulares, esto lo vio Yadira por eso aprovecho.

La reputación de su hermana había terminado aquí, está noche.