DES

S DES

a! ¡Lle

ededor mientras masticaba un chicle. El lugar estaba apartado co

sera. Ya eran las diez y cuarto de la

stas preguntan rodeaban su mente fue

có su teléfono y volvió a comprobar e

tarde. Es un modelo en apuros. Necesita un lugar donde quedarse. No te dejes llevar por su aparie

. Su tonta amiga ni siquiera compartió su foto p

añana. Necesito viajar urgentemente. Mamá está enferma y ingresada en el hospital. Henry estará

pezó a lavarse las manos. La forma en que su ex prometido y su hermana

Necesito mostrarle a Brayan con

cuando encontró a un hombre alto con una camisa azul marino sentado en la mesa de la esquina. T

ntalla de su computadora portátil, pero vestía un traje de marca

s a Dios! ¡Él está aquí! Grac

ia la mesa. Cuando él no levantó la vista, ella golpeó la mesa

uería recordarse a sí mi

cionó que estaba increíblemente sexy

—su voz profunda y masculina llego a sus oídos. Sus gé

dios griego! Y... él est

ndo que ella habla

ó y luego, sintiéndose como una tonta, extendió

ostenerlo, siguió mirándola fijamente,

nte! Pero también parecía un gilipollas certificado. ¡Dio

y demasiado brillante,

ucha

nombre, él la miró como s

a de cine Henry Cavil. Pero ella

tado sobre mi necesidad

scul

lo de interés br

ré en el sofá —dijo y como ahora llamó su atención, ella le puso la mano en el brazo—. Mi dinero está estancado. Una vez lo recuperaré. Te pagaré g

hielo resquebrajándose en sus ojos. Él miró su mano que yacía sobre su brazo. Vio

ces que

que ella estaba es

esto del matri

il... Tan pronto como sea p

el levantó una cej

lla pregunt

era tan sencillo. Fue u

De lo contrario, el trato se cancela —dijo y

cercó a él rodeando la mesa, con sus ca

n vistazo. Pero a ella le im

hecho

él parecía tener sus propias conexiones. Desde organizar un s

to legal de matrimonio la mano. Habían llegado has

untó a ella, que estaba metie

suerte —dijo y le sonrió, luego le dio un trozo de papel—. Aq

is, sin darse cuenta de que él seguía mirándola s

su teléfono e

amigo! ¿Dónde

s! ¿Qu

oso y Celine no responde el teléfono. Lo sé, se suponía que se casaría contigo por diez millones e

entemente—. Que se joda ella y su p

gritó, del otro lado

o el Ceo de la compañía. Te envío la instantánea de mi certificado de matrimon

re? ¿Quién es la chica?

uien le paga. Ella es la que me paga y tam

e atragantó mientras tomaba un sor

sí mismo. Parecía que su novia de último mo

i coche, David

, s

e Napier se detuvo cerca de él. Un chófer unif

discreto como arreg

to trasero con la mente relajada. La tarea que parecía im

ien debía pagarle a alguien para que se casara. La chica pa

fundiendo con

ra el hombre