uando estuve a su lado está allí y quiere volver. Y eso me hace débil, muy débil. Anhelo sus abrazos y besos. Esas noches donde dormíamos juntos y jugaba con él para que se levantara a prepa

é no me detuvo? ¿por qué no me buscó? Yo lo hice después de darme cuenta que realmente si quería algo con él, algo serio. Quería conocer

igos, en algunas ocasiones cruzamos miradas, pero no puedo hacerme ilusiones, no me he dad

i vaso de cerveza y l

se vienen a nuestra mesa. E

o? —pienso en algo inteligente que

ue qu

as chicas se cortan el cabello cuando cierran un ciclo, es cierto. Lo he hecho para cerrar un ciclo, per

borracha

toy —c

allí, antes de que com

la estupidez de in

edi

úsica de

asero con su paquete y solo cuando terminó la canción pude irme con la poca

Era Matías. Sabía que tenía sentimientos

quier

n poco, tan

aron en mí y me p

k cuando me viero

icho? —reprend

la v

ar, te llevar

porque lo que hice fue llama

? —Le había

¿Qué quieres?

ía saber q

col

a ma

respondido una chica. Era mentira. Él n

hablar

N

eno

mante. —Y

a escena en mi mente y quería patearme por ello. No lo superé hasta que dije

pág

*

sada, como si hubiera dormido un año. Quiero volver a la cama, pero ten

es aquí?

en la mano. —¿Ahora quieres asesinarm

do, creí que no

sieras —

impatía a este tipo que me quitó la poca dignidad

arándote al

Miro la ventan

todo el dí

oma as

aya ordenado, sino que mi

rte Miles,

garganta cuando lo veo caminar con el cuchillo.

llamar

é. Dice que

en

jaría contigo

En sus ojos veo culpa, no sé a qué se deb

or esta noche, por

sada, lo dejo g

na te

nr

dita so

cocine

que cenamos juntos. —coment

ques e

re tuve preguntas ¿por qué n

r del tenedor. De pront

porque insististe. No voy a tolera

os me qu

levanto de la silla y voy a la puerta, la abro. —Quiero que te vayas —grito. Es

leva

S! DEM

e dejo caer en mis rodillas, no me deja inhalar aire. Miles

te. Trata d

urpura, me paralizo. Está sonriéndome, abro los

despierta. Se queda mirándome por unos minutos, después recorre mi cuerpo hasta llegar a mis pies, me jala el pide derecho, eso me hace despertar. Mi c

e mamá llega a

razándome, mientras sigo mirando a la s

no por mí —señ

se

Tuviste una pesa

l. Lo fue esta ve

ra se h

les está a mi lado cuando me despierto, está

cosas sin sentidos. Tienes fiebre —lle

s —mu

ré lo que

en sus ojos y compasión. Estoy aterrorizad

uié

som

rehúso. Necesito calor humano, porque ú

o vacía

ortan, y me duermo n

*

Necesito levantarme, pero mi almohada huele bien y se siente tan cómoda. Mis brazos se aferr

uede

te abrazando a Miles

nas y brazos alred

esta posición. —tiene los ojos

hacía —

ado. Eres pés

odi

de correrlo de mi cama, pero ant

icamente —prepárame algo

ayude? —lo fulmin

do cuando entro a mi baño, lo hago. Esas bromas se

ciente me

currido a Miles abrir la puerta mientras me estaba cambiando. Sé qu

irón

desnuda, cuando todo el tiempo lo hizo

onro

e pregunta por qué me he so

ucho cuando me cocinaba. Era bueno en ello. Sorb

u casa primero para cambiarse y darse un baño. Veo ojeras debajo de su

pro un deta

e quedo con el obsequio y lo meto al fondo de mi bolso. Salgo corriendo a mi departamento, tratando de

que le envié el cor

con mi corazó

mis escritos. Y una

felicidad. No

. Me la paso revisando mis escritos una y otra v

a. Tengo varias llamadas perdidas de Miles y mensajes preocupado de que me haya pasa

irecto a

a, alguien quiere derrumbarla. Me pongo la bata y

suelto cuando me enfrento a la p

ido a mis mensajes? —el cabello lo t

do, estab

encuentr

. Puedes irte, ahora que h

racia ¿puedo entr

ete a

n vaso con agu

vaso con agua, ya que él

Ni pienses que te puedes queda

tras la toma asiento en el sofá.

jes dormir, por favor. —lo muevo, pero es una roca. Sus respiraciones son lentas y la verdad es q

*

ano para que yo pueda ir con ella. Me quiere llevar. Las ventanas se abren y yo me levanto de la cama, anhel

y asustada ¿Cómo bajaré? —Quédate ahí. Iré por ti. No saltes, por favor. —Miles está aterrorizado de que salte, no lo haré ¿Có

La lluvia cae sobre nuestros rostros, estamos respirando el mismo aire y me es difícil hacerlo. Después de que estuve a punto de mo

os tocan los míos como si fueran tan delicados, pero después el beso se intensifica, estamos acostados en el suelo de mi balcón con la lluvia cayendo, y no puedo creer que siento mucho calor. Nuestras ropas comienzan a desaparece

no hay calor. Es como si otra persona me hubiera poseído para hacer esto. El yo normal, toma sus ropas y se m

pierto por

se ha