hojas al suelo cubriendo las calles de una gran capa de hojas amarillentas y anaranjadas. Falta muy poco para entrar en

el sol ocultándose, el viento soplando enfriando todo y alejando el c

resa por mi repentina confesión, su cara se puso roja y esa extraña expresión que nunc

ás hablando?

miedo se apoderaba de mí, mi lengua se traba, mi mente se congel

mano con fuerza y la apretó provocando q

ro que esto es una mala idea (después que me involucre en este horrible plan). Su mirada cambio se convirtio en la mirada de un asesino (más de lo habitual) sus

de voz, mi mano me duele mucho y quiero

ire y sin pensarlo dos veces, me tiré encima d

su expresión vale 25 quilates de puro oro, se tocó los labios con la yema de sus dedos, ‘¿Qué hice?’ me pregunté,

io la vuelta y prácti

ll

+

eír victoriosamente de oreja a oreja, lo peor de todo fue que mientras más le

me equivoco—de la nada

até de apartarme, pero sorpresivamente é

que envolverlo poco a poco, averiguar sus secretos, a que le teme, trata de meterte en su vida lo más que puedas

que es al

ue el que nosotros ejerceremos en ellos. Recuerda, que la vida no es

nde vas? —

s, después hablamos—m

, acaso ¿ser diferente es malo? ¿Qué te gusten otras clases de cosas es malo? ¿afecta a alguien la conducta que tengamos? No lo creo, tampoco entiendo el querer sent

ué dudo

tido algún tipo de pecado de manera injustificada y nadie hace nada, de alguna manera entiendo a Phillip, él qu

+

penetrante y afilada que me observaba desde lejos, sentí como mis cachetes comenzaron a enrojecerse ‘¿Por qué diab

cosas, ya era lo hora de e

iente como para enfrentarlo (por los momentos) y tampoc

cara a alguien, retrocedí rápidamente para escapar por la entrada trasera, pero de repente sentí unos pasos atrás d

n paz. Mi corazón comenzó a acelerarse al ver que ya no había mucha gente y que la mayoría que quedaba, entraban en sus activid

a temblar incluso me die

orque del susto que él me dio, los

e pregunté bas

dad—su mirada cambió a l

regunté algo

un momento se

palabras, me paralice y de n

orque ya no puedo retroceder, estoy aquí y

me gust

+

o estoy orillando a hacer algo que no desee. Salí de clases y me dirigí al consejo estudia

é me ayudó con todos los presupuestos que debíamos sacar, tanto par

presupuesto, porque el año pasado no pudimos realizar va

ntos son para recaudar fondos para otros ev

e y sonreír pícaramente—. ¿Qué pasó? ¿Es verdad lo que te dije

jiste era cierto—ella

e inmediato le hice una se

molesto—. No ves que la

pechaba—sé que Rosé es muy intuitiva y cuando ella me contó el “supu

una de ellas, Vanessa, nos contó que a él no le gustaba mucho besarla y que ella sentía que incluso le tenía algo de asco. Con Mili, más de lo mismo, Alexa sí nos contó que ellos salieron fino, si se besaron, que llegaron en algún punto a tener intim

sabes? —Ella me son

mejor amiga—ella se levantó de su asiento y me

nosotros dos, al ver que no nos despegab

ionó algo molesto, para l

e él es un cero a la izquierda (muy a la izquierd

+

n Raín. Revisé mi celular y me percaté que ya iban a ser las 4 de la tarde, terminé de organizar t

rpeta y toqué la puerta del despacho. Él t

dientes blancos y una mirada filosa, entré en

jos me examinaron de arriba a abajo. Le

n agregue unos presupuestos que solicitaron el

. Lo observe por un momento; su cara, sus rasgos bastante finos, es una persona con un fu

ue te gusto—levantó la mirada de la

son

saría mis ojos en una persona como tú, que en vez de

que lo moleste, la guerra se encu

ntes de salir, me di la v

ue decir? —Y

la nota que le preparé—su ex

cabas d

le haya gustado. La prepa

o lo que no sabe es que a mi también me encanta y si él puede jugar

tin