an un amor

4: Nues

sy B

a que mi corazón comenzara a dar saltitos, aún sabiendo que estaba a mi lado la chica con la que salgo. No podía dejar pasa

ciera daño, y eso fue doloroso, a pesar de que no dejé ver que me había lastimado su comentario. No quería ser grutesc

l color, y empieza a notarse su cabello castaño. Luce tranquila con el

daño? —el silencio que había entre n

ste daño un

ir que e

e hecho daño,

tó todo. Tú —me señala— me hiciste daño cuando

la entrelazo con la mía.

ha descontrolado? —quedo enfrente de ella, y toco sus labios, logrando que se le escape un ja

ta con rapidez, y de la misma manera se apa

to no lo recuerdo, pero mamá me contó lo basura que fuiste conmigo porque no me enamor

lejos, y tú lo sabes! ¡Ya deja de hacerte la que no sabes nada! —Ya no podía seguir callándome lo que llevaba guardando—. Llevaba meses c

vo meses tratando de entender quién soy, y tu presencia me está arruinando todo! —Hace una pausa para tomar aire—. N

es Ale

o un solo segundo—. El único

—. El día del accidente estabas conmigo, po

abeza, y no hace más que llorar. Me duele saber que le han creado una v

una vida falsa —me empuja—. ¿Qué hay de las fotos que te

s sentimientos están congelados. Yo no esto

ado a otro, y pa

ahí quería llegar yo—. Demuéstrame que mi famil

enta que ellos son los

fuerte, porque me

ace

vida: la vida que te han oc

…

cil. Cuando los llamé y les conté parte de lo que había pasado, ellos se

menos, después de casi un año. Zhair fue el primero en pon

? —Lía los señala.

ucha la historia qu

n uno de lo

estuvieron. Hubo un tiempo donde una de las chicas fue violada, y ella se calló eso por miedo que la chica que amaba la rechazara —toma aire, y yo dirijo mi mirada a cada uno de los chicos que tienen sus lágrimas cubriendo sus mejillas, en especial Lía—. En todo momento estuvieron el uno para el otro, y a pesar de que a veces eran un caos, se ll

an ellos? —p

mira—. La chica del accidente eras tú, Lía,

evanta del mueble—. Alejandro me ha dicho que y

vieron por estar de pendejos en un centro comercial —le señala la foto donde estamos vestidos c

del accidente por una cicatriz que tengo, sé que Berni es mi hermana melliza, y recuerdo una muralla que es

roga Berni—. Se supone

contó

ue llamas mamá, te ha hecho la vida imposible y todo porque estabas enamorada de una chica. No pued

no es

y por eso me quedé callada ant

os toca y aparto mi cabello para que vea los míos—. Me l

rla más. Va a ser duro lo que se viene, y muy doloroso. Lía está vivi

do y cuando salgo a mirar qu

pued