an un amor

2: Quiero

Sel

en especial. Hace algún tiempo la llevo soñando y me asusté tanto cuando se acercó a mí que fui grosera con ella. Quería recordar algo sob

me han dicho desde que desperté de un accidente, y lo primero que miré fue su bonito rostro. Ha estado conmigo cada vez que lo necesito, pero por más esfuerzos no logro recordar nuestra boda. Solo sé que es mi es

inimos a esta ciudad. Hay algo que no se ha borrado de mi memoria, y es Berni: mi hermana melliza. Siempre quise verla, pero mis papás me decían que

e no recuerdo. Alejo dice que es él, pero yo estoy casi segura que no. Estos días me he sentido tan triste, siento que est

incómodo dejarme tocar por mi esposo, no le digo nada, pero no me gusta tener intimidad con él: me sie

una sutil sonrisa—. ¿Cómo fue que me quedó esta cicatriz? —levanto mi

eza con algo de

accidente, ¿

s piernas y él me da un beso—. Es que yo tengo recuerdos muy vagos

—suelta sin darse cuenta de que sus palabras han sido tan crudas

lo log

recordar quién soy, de dónde vengo y por qué parece que aquí nadie me conoce. Quiero saber todo de mí, y nadie me habla

asfixia no saber nada de mi pasado. No cabe duda que necesito salir de aquí. Me arreglo un poco el cabello como me enseñó la terapeuta, y salgo

ocer más allá de esta pequeña ciud

l blanca, nariz pequeña que lleva un arito, cabello largo y de la misma estatura que yo. Ella se mira sorprendida,

ra, pero no tengo idea quién eres —dejo salir risitas por lo ner

es que estás aquí? Todos han pen

os, y cómo es eso

a hablando la chica de nombre ra

confusión se queda callada—. ¿De verdad no sabes de qué

con mi

tengo que re

caminata ha fallado. Regreso a casa y cuando estoy por abrir la puerta siento a alguien detrás de mí. Miro po

es de alegría por verme. Tengo lindos recuerdos con mi h

e uno siente lo que la otra, no lo sentí yo —me vuelve abrazar—. Te he extrañado como no alcanzas a imaginar

a. Ella se mira tan frágil, pero no la abrazo—. Tengo una sopa de letras en mi c

hay

ña que no sé su nombre —aguanto las ganas de llorar, no quiero verme vulnerable—. Mi vida es como una película, c

ste tiempo has vist

do tienen tiempo a vis

spo

e que le ha dado gr

qué t

ual —me quedo en silencio por lo que ha dic

ustan las chicas, y no puedo estar enamorada de

á l

nriendo con una chica que besa mi mejilla—. Ella es Betsy —pasa más fotos y me

tero y comienzo a gritar—. No sé quién soy y me sales con que yo soy h

ma. Apenas y recuerdo mi nombre, y resulta que mi

vida es un

o la v

rás. Ven