img COVET: "Siete Corazones para Bianka"  /  Capítulo 3 Tres | 60.00%
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Historia

Capítulo 3 Tres

Palabras:2687    |    Actualizado en: Hoy, a las 08:45

fortantes, pero para mí, también estaba cargada de expectativas y ansiedad. Fue entonces cuando Elais pasó por mi lado con una sonri

s todas las preferencias de mis hermanos, ya tendrás tiempo

ncima de una enorme nevera y solté un suspi

o hoy dijo que iba a descansar, así que podemos prepararle unas tostadas y huevos como a Gerión. Deimos solo desayuna frutas, las cortas en pequeños trozos y las pones en una cacerola -mientras hablaba se acercó a la nevera, sacó cuatro huevos y un est

eca tonta. Estaba asustada, como iba a recordar esos detalles, aquello era solo el desayuno, aún quedaban

amientos-. Pero estoy seguro de que ser

caminé hasta la enorme isla donde ya

ón y Austros. Corta las frutas para Deimos y saca dos pedazos

eron un poco de confianza y juntos, logramos preparar una deliciosa y abundante comida para todos. A medida que el

edas lograr

ya todos los hermanos se encontraban sentados. Los siete pares de ojos a los que debía acostumbrarme en lo adelante, se posaron en mi. Tragué en seco sintiendo como mis pulsaciones se aceleraban. De

a -me ordenó Gerión y

vo listo, comenzaron a comer en silencio. Me quedé de pie, en una esquina esperando alguna opinión de ellos sobre mi trabajo, pero solo comían sin expresión alguna. En el burdel solíamos platicar durante las c

rás salieron Austros y Felis, que volvieron a cuchichear entre ellos mientras caminaban. Cuando Caelus se levantó, el y Gerión se dieron una mirada que solo ellos en

enorme adorno con frutas artificiales que descansaba en la mesa. Me hubiese gustado que pensaba, que tema hacía que s

os regresamos en la noche, debes tener

ne, señor

esperándote en el

n de los señores estaba repleto de árboles gigantes y muchas flores. Pensé que una buena idea terminar mi trabajo pronto para poder recorrer la casa. Cuando finalmente llegué a la ent

White? -m

en alerta-. ¿U

os y me tendió su mano a modo de saludo co

presentó-. Uno de los

oga

bogado, el que se había reunido conmigo y con Delle para explicarnos los a

ije con educación-. Pero mi

omo por el hombro sin antes mirar haca todos

z sonaba angustiada-.

erpo al escuchar sus palabras y m

o su dinero en sus

burdel que maneja Delle, no era un hombre adine

uación-. No se que pretende pero no tengo dinero

o por su cabello dese

de tu padre, también soy tu p

i madrastra, cuando mi padre murió fuimos las únicas en

-le pedí a

información de repente, pero debes cu

ese por

del jardín. Me quedé ahí observándolo hasta

y por qué me había a

otros negocios y me lo ocultase. En su testamento el abogado leyó muy claro como dejaba todo a manos de Delle y la orden estricta

de las manzanas que había en el frutero, no solía comer mucho en las mañanas. Una vez lavado todo, organicé las cosas en la cocina para que me fu

s. Una vez el polvo estuvo fuera, agarré un balde con agua y la regadora y limpie todo el primer piso. En el segundo las dos primeras habitaciones estaban completamente ordenadas y limpias, una de ellas era la de Deimos y por la

en el comedor. Me sentía totalmente exhausta y agotada. Mis manos estaban entumecidas y los ojos me pesaban. Me se

.

totalmente a oscuras y me puse de pie con cuidado, encendí la luz y observé el hermoso cielo estrellado a

llegado a la

i rostro se calentó de la vergüenza, se

iendo aquel ruido. A medida que me acercaba se iba volviendo más claro. Era la v

Autros! -gimió u

susurré p

la vuelta ahora mismo

si solos. Y me acerqué más a la ha

o no est

rcharme, pero enton

con una voz ronca que mando escalofríos di

lmente desnudo apoyado de rodillas en la cama y una chica de cabello rojo apoyada en manos y pies mientras él la penetraba un

y excitada y mi maldita cabeza me envió imágenes mías en esa cama mientras el metía su polla una y ot

una puta vida normal c

nadie y bajé mis bragas con cuidado. Acaricié mi coño con uno de

una polla, no

s y la chica de fondo. Quería llorar, el cúmulo de situaciones llegó de repente, solo querí

urrando mi nombre se e

e me había encontrado en el pasillo con las bragas en los muslo y masturbándome mientras escuchaba a su hermano follarse a una muje

por lo bajo

rta. Mi rostro debía de haber estado más rojo que la sangre. Sus brazo

, lo s

me atreví a observar sus ojos osc

ofrío recorrió mi columna v

ió y se coló por debajo

taba ha

ió lentamente mi coño y

nka -pegó su cuerpo al mío y

u lengua comenzó a juguetear con mi oreja y sent

tras escuchas a mi hermano follarse a otra? -me pregun

s intentaba moverme para que acelerara sus caricias. Pegó mas su cuerpo a mi, acorra

tan, será nuestro oscuro secreto, Bianka

y adentró dos de su

brió mi boca evit

n su toque, su cuerpo pegado al mío, el calor de su boca en mi oreja. Deimos sabía perfectamente lo que hacía y estaba volviéndome totalmente loca cada

iera. Estás tan apretada que estoy mu

totalmente diferente a tocarme yo misma. Me agarré de su camisa cuando no podía contenerme más, e

nían a salir y nos separamos con rapidez. Observé la mano de Dei

ido un placer, v

is bragas y corrí hacía mi habitación. Cerré la puerta detrás de mi y

de mi vida, pero cada vez que veía su rostro, veía u

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