era borrosa al principio, luego se
oliente en los barrios b
acurrucada junto a unos contenedores d
los diec
mina corría por mis venas, matándome lentamente. Era la única supervivien
oven se arrodi
más joven, pero con la
quitándose su caro
e. ¡Alguien ayúdeme!",
resp
en sus brazos. Yo era ta
e yo apenas estaba consciente, "t
amos en una mansión lujosa, l
deró de los sirv
ría ser contagioso!",
directamente al salón principal,
vera pero justa, se levantó de un salto. Doña Isabel
ntó Don Alejandro, su voz una
médico. Se está muri
briles, el veneno que manchaba mi piel. Su rostro, el de u
Di que es una emergencia. Prep
mostrando fragmentos de
s y poniéndome paños fríos en la frente. Don Alejandro usando toda su influencia y fortuna par
me contaba chistes malos para hacerme sonreír, me p
n. El sol calentaba mi rostro. Doña Isabel me estaba enseñando a bordar. Don Alejandro me obser
la familia,
n se des
ribunal. El efecto de la planta me d
lencio no
gnación se levant
o!", grit
la vida y as
morir mi
ia, en lugar de explicar mis acciones, solo había confirmado su vered
ro una máscara de dolor
dieron todo. Amor, un hogar, una fam
mano deslizándose poses
seductor. "Algunas personas nacen con el
ía paralizaba mis cuerdas vocales, una to
ente a mí, su rostro
esito más. Necesito entend
hacia el
segunda