ue sorprendió a su equipo. Ignoró las decenas de llamadas y mensajes
o encontrar un lugar para vivir, temporalmente. Fue
antes porque Mateo tenía un "evento de networking crucial" al que ella debía asistir. Recordó cómo había vendido su primer y pequeño apartamento, el que había comprado con su
mor," le decía. Y ella
diseño. Era un mensaje de un núme
ollares de diamantes que Mateo le había regalado a Sofía por su aniversario. El mensaje
l. Borró el mensaje y bloqueó el número, pero la imagen quedó grabada en su retina. La sonrisa
ta de colores. "Señora Sofía, ¿cuál d
jo vende. Es pasional." Ahora se daba cuenta de que él no entendía nada de su arte. Para él, todo era una transacció
a, su voz firme. "
a una nueva cuenta. Empacar solo lo esencial. Cortar lazos. Cada acción era un paso deliberado pa
unos documentos personales que había dejado en la oficina que compartían. Entró en el edificio de oficinas
a voz de Mateo y las de dos de sus
ateo. "Debe ser la menopausia adelantada. Me sa
qué vas a hacer? Con el trato europeo e
ado. Le daré un par de días para que se calme. Ya sabes cómo son la
La condescendencia en
serio. "¿Y qué onda con Camila? Llevas años con
? Había pensado que era algo recient
. Pero Sofía... Sofía es el plato principal. Ella tiene el nombre, el talento. Es mi boleto dorado. Siempre lo ha
do en una farsa durante años. Cada beso, cada "te amo", cada promesa, había sido una mentira calculada. No era solo
ormó en una calma helada. Ya no había nada que salvar.