del Reino de la Noche también exhaló su último alient
i hermana Sofía, to
a muerta. Suplicaban a mi antiguo esposo, el Rey Ricardo,
, su voz, que una vez me susurró promesa
erte sigue queriendo dañarte, yo personalmente destroza
al coro de odio. Sacaron la bandera de contención de almas, un artefacto oscuro que solo
arrugado por el rencor. "Deberíamos sellar sus restos en un cerdo feo para q
a idea excelente! ¡Que su alma in
dirigió a la tierra salvaje donde una vez me exiliaron. Pe
tradas ante mi tumba, sus cuerpos sin vida congelados en una posición d
queña estaba sentada, abrazando mi tablilla conmemor
e firme para su edad. "Mi madre ya se ha desvanecid
sido desafiado de esa manera, y menos por una niña. Su rostro se contrajo en una máscara de furia. Si
o conmigo, arrasaré este l
os cadáveres de las brujas, que habían encontrado un extraño reposo en
a de choque, escupió una bocanada d
roteger a mi hermana, Sofía, como si fuera la joya más precia
mi madre con asco. "No dejes que es
y naturalmente, tamp
eña! ¡Mi
n fragmento de alma, ni siquiera un espíritu completo, atrapado milagrosamente en la horquilla de
a gritarle a Ricardo que esa niña, a la que tratab