img Una Oferta Irresistible  /  Capítulo 2 Cap. 1 | 4.17%
Instalar App
Historia

Capítulo 2 Cap. 1

Palabras:2649    |    Actualizado en: 14/09/2021

s, porque siempre va a aparec

o malo, que hacerlo te convierte en una mala per

luchar contra las mentir

favor! —grita la recepcionista de mane

era mi única oportunidad y quizás en un futuro me agradecería a mí misma por esto. Estaba decidida a seguir la recomendac

ando con las manos sudadas y pensé que en c

ali C.A; por lo tanto, sus dueños eran ricos en una magnitud desorbitante. Ella me informó con exactitud la ru

derecha, al fondo vi el letrero con su nom

e sintiendo el miedo palpable

¡ya casi es

la mujer que desde hace rato corría tras de mí, estaba pálido, y siento cierta compasión po

ahora ¡Entra ya!, dice m

para luego dar vuelta en direcci

la puerta estuviera oponiéndose a mi entrada, a veces pienso id

itándome el cabello de mi cara y arreglando mi zapat

ujer tras de mí—. ¡Ya llamé a seguridad!, esta señorita aquí prese

erada y asustada por lo

trificada, entonces hay tres hombres muy parecidos entre sí de

oz más razonable mientras tod

e mayor de todos estos—. ¡Por favor necesito

fa

los tres hombres no dejan de mirarme fijamente; pero uno de ellos el

izás su hijo mayor, rompe el silencio—. Se puede retirar, ll

mera vez su nombre mientras en mi cuerpo una sensación

y se dirige al extremo de la oficina donde hay un v

a y dirijo toda mi atención a Ercan Ankarali, quien e

sculpas, sé que esta no es l

echo? —pregunta volviendo

icar—. Ha sido en vano, lo han negado vez tras vez —objeto en

sp

o me da miedo estropearlo, no puedo cometer ningún

spirando de la manera correcta, así que mante

ite, estoy en el primer año en la Universidad de Kent, finanzas para ser más específica. Pagué el primer semestr

engo que ver en todo eso?, más

enseñó—. En realidad, todo el mundo ha visto su programa d

fec

ojo como el hombre en el ventanal se gira y me traspasa con la mirada—. Lo que quiero proponer es que trabajaré para usted, para su empresa, en el puesto que quiera dar

s que decir, ahora

ta y camina en

cualquier persona! —dice tomando una pluma, u

pued

mis pies hasta mi cabeza, tomo lentamente la libr

biendo todo lo que pueda necesitar; teléfono, correo,

ientras le entrego la libreta junto co

os… —Señaló a ambos hombres—. Y lu

endo agradecida y procedo a dirigirme a la sa

a punto de salir, pero una

abla es el hombre más joven de los tres—. Quiero decirle que u

o al contrario del pensamiento

*

s des

mí en diez minutos sería… perfecto —acentué la última palabra

se preocupe —respondió el conductor

para mí, porque de cierta forma lo iba a necesitar. Estaría el resto de mañana en una sala de reunión con Ángelo, dispuestos a batallar con cuatro in

la decisión de vender, y por supuesto empresas Ankara

el auto frente al hotel, seguidamente tomo un billet

sido muy amable —d

me ayudaban mucho. Llegando a la recepción me dirijo al c

—. Soy Samantha Whi

de inmediato dándome una sonrisa de portad

e encargo fuese el mejor trabajo de su vida, y yo comienzo a traga

digo apresurada—, debo

umplir con ello —el chico vuelve a interrumpirme mientras cierta irrit

e le dijo Ángelo, y no me queda más que suspirar profundamente y prep

ocándose un poco incómodo. Pero luego deja la nota en el buró de mármol y prosigue—. “Si estás vest

s ganas de salir corriendo y de

gonzado y le doy la razón, él ni siquiera había leído las notas de

go de inmediato, disimulo y hag

n seguida sin esperar su reacción, siento que mis mejillas est

o Ángelo hace

idamente, bajo un poco el vestido negro que hizo Anne para mí, a

aller de estrategias en ventas y desde ese día congeniamos muy bien; cabe resaltar que Anne no estudia finanzas como yo, su car

os que compartimos; es más por la compañía, por su sincera amistad que valoro cada día po

al piso diez observando que

iándome a la chica que está

mos por comenzar —contesta ella con

personas a su alrededor, porque ese es Ángelo; absorto, severo e impenetrable. Quizás el dinero lo haya hecho así, porque quizás en su vida no había pedido algo cuando ya se lo estaban pon

tante gira hacia mí y dispone

os en recepción? —pregunta como si

ra

pagará, a pesar de que he sido su asistente por todos es

asiento, le miro

en el lugar acordado, no falte por favor… —le miro fijamente sin pestañear, y este disimula una sonrisa de descaro

ntes, seguido de eso un coro le responde como si él fuera el amo y señor de todos. Yo asiento

e arruga e

ndo ofertas de parte y parte. Hice mi mayor esfuerzo y Ángelo como siempre sacó su mejor arma de persuasión, aunque debo acotar que hoy está

tar el negocio familiar, sus hijos le ayudaron únicamente a gastar y al mismo tiempo su director ejecutivo no tomó las mejores decision

en Ángelo, que, nuevamente está centrado e

ilia Ankarali estuvieron a punto de romper todo lazo que los unía, quizás por tradiciones y cosas que nunca pude entender, pero que por supu

onía p

y mucho menos algún acercamiento por exigencia de mí mismo jefecito; hay cierta rivalidad en ellos, una que nunca he podido entender, pero creo que desde que Adr

ano. De mi parte amo profundamente a esta familia por causas más que explicitas, les d

Instalar App
icon APP STORE
icon GOOGLE PLAY