EL TRATO - Del odio al amor solo hay un paso

que se alejase tanto de casa, y, sin embargo, no lograron hacer que ella se quedara. Solo le faltaban dos años para graduarse con una licenciatura en música y había tenido

l y se dirigió al campus a terminar de tramitar su papel

del mobiliario, los pisos de madera, los candelabros y las luces. Soltó el aire mientras caminaba por los pasillos, adaptarse a lo impetuoso de su nuevo ambiente iba a ser bastante difícil. Buscó la literatura básica del curso, y mientras caminaba en rumbo a su piso de alojamiento, u

AAA

n una de mi

aquel grupo de hombres les daba su autógrafo, se tomaban una

as sus nuevos libros habían acabado en el suelo. Rápidamente, el casta

s que no te he

s brazos. –Si fueras tan amable de decirle a tus aloca

sa acercándose un poco más y provocando los gr

ejó. –Adiós, disfruta tu mar de hormonas. –Caminó atravesando las chicas que solo se aferraban

r, uno de los compañeros de Liam.

verla alejarse casi que

uno de los edificios del campus. –Suerte. Bro, estos últimos semestres nos

sible a su departamento dentro del campus. Liam comenzó a

s Rev

se y encontrar más. Juntos los cuatro, Trek, Xander, Paul y William, habían logrado obtener mucho más prestigio al lograr entrar al Royal College of Music. Su estilo, su música, todo en conjunto los llevó a ser uno de

ron a proclamarse fans ¡K-Vengers! Su música sonaba en los altavoces de la escue

Liam quería vi

nzó un cojín a William para sacar

sta aquí y de lo orgulloso

anzó un par de latas de cerveza que sus amigos atraparon. –Ten

–Dijo William bebiendo de su cerv

*

triunfarás. ¿De acuerdo, Magnolia? –Sonrió. Aquella noche iba a relajarse un poco en la fiesta de bienvenida. Tenía que arreglarse con lo poco que tenía. Su hermano ya le enviaría el resto de sus cosas la siguiente se

Magnolia disfrutaba de la música presentada por los mismos estudiantes. –Hola. –Volteó a ver quien la había saludado

a. Sí, soy nueva, pero en realidad e

vienes? Porque s

–Contestó la pelinegra a la r

ol de esta escuela. Ven, sígueme. –La rubia, entrando rápido en confianzas, jaló a la pe

e,

staño en cuanto lo encontró. –Les q

Dijo sorpren

mento si mi hermanita te molestó. Tanto tint

, ella es Lía. Lía, es Xander, mi hermano mayor. Segunda

a conocida. Magnolia comenzó a sentirse incomoda bajo

a el nombre de las personas. Bienven

e visión fue la pelinegra con la cual se había topado en la mañan

ontestó

Séptimo semestre, como u

ándole a la rubia. –Un placer conocerte oficialmente,

para sus ojos. Por fin una chica que no caía rendida a los pies de Liam. –Iré a ver…

sa. ¿Katrina? ¿M

a afuera, somos los siguientes en salir. –La rubia los dejó busca

. –Que sorpresa. Lía, ti

s a ir de

ama a Paul y a Trek,

*

ándola del brazo. –Acércate, los chicos van a

silencio se hizo presente en el momento qu

r. A su izquierda, Trek y en la batería, Paul. Paul es verdaderamente guap

a? –Lía rió un poco y vo

do los gritos de la mayoría de la po

tir que ellos están h

an esa clase

hree” de Liam y juntos comenzaron a tocar Live Forever de Oasis. Guitarra, bajo, batería.

n, la historia era otra. Vio como Katrina se acercó coqueta a Paul, sin embargo, él solo la mantenía un tanto alejada. Los demás, abrazaba

che y al alzar la mirada vio como la pelinegra salía de la f

ngo una compañía excelente. –Termin

*

. –Ya, no vale la pena. No tienes por qué topártelo siempre. El campus es enorme. –Se sentó sobre su cama y abrió su laptop para encenderla. No sabía porque aún tenía la foto de su exnovio de fondo de pantal

hablar con su hermano la ponía de buen humor, y, para

*