dejaba pensar con claridad, incluso se aguantó un par de veces para no levantar a golpes a Miguel él cual no la dejaba en paz, quería que Alida pasara una noche divertida

ndanos con un chorrito de vodka. — el bartender que se encontra

ede? — pre

o harto de Mig

para qué viniste?

e tengas experiencias nuevas y que t

tar aquí, realmente todo e

quí señor Morrison, no

reja el cacho de cabello que cayó a un lado de su meji

chica. una corriente fría se pasó por todo el cuerpo de Alida, su mirada se fijó en las

n su cuello, mientras q

te sientes mal? Tien

o, por haberse exc

un poco abochornada. — v

edamos aquí? —

do por dejar a el

se encontraba con una chica y le estaba devorando la boca. — estamos mejor solos Alida, créeme. — Gael se inc

e su jefe, lo deseaba con todo su ser, quería que la tomara y la poseyera hasta que ambos desfallezcan, recorrer su

cielo cuando lo probo. No esperaba que su jefe respondiera aquel beso, pero se sorprendió cuando comenz

s. — pero... — se separa de Alida. — yo no soy bueno para ti lin

ñor

ro que te azotare hasta ver tu hermoso culo rojo. —Al

qué me sucedió, solo fue un

mpre me has gustado y no sabes cuantas cosas se me han pasado por

uspiro ante la s

local, el chofer de su jefe se encontraba afuera fumando un cigarro. El hombre al verlos Salir apago el cigarro y expulso todo el humo que tenía

nca se había puesto de esta forma ante una chica, pero de lo que si

e algo en mi vida como ahora

z no quería que el chofer la viera de otra forma, así que fue

rostituta en los años de cristo, para luego ser apedreada por su padre y vecinos. Sacudió su cabeza y dejo todos aquellos

da normalmente la omitía porque fue completamente horrífico lo que vivió durante un año, nunca entendió porque el ser humano en específico el hombre, se dio ese poder de maltratar a una mujer y

or. Una épica escena de 50 sombras de grey atravesó la cabeza del empresario, se vio tentado, pero prefirió dejarlo pasar, tenía algo muchísimo mejor para la pequeña mujer que lo acompañ

arándose mentalmente para lo que va a s

ambiara nada la relación que tenemos,

camente podemos sacar todos esos deseos. — Gael se p

— suspir

ntes labios de su jefe y cam

Alida. — ahora quiero que te pongas de rodillas,

le dice. Se coloca sobre sus rodil

ede a desabotonarse el pantalón y este cae. Gael queda desnudo delante su sec

enza a masturbarse para enderezar su grueso falo, mi

ca y saca la

zo. Gael lleva su mano izquierda a la boca de

te y succiona muerte, provocando gemidos por parte de Gael. Empuja sus dedos mucho más atrás y la

mo Gael se lo llevaba al grueso

lmado. — su voz se escucha

de Alida y esta de inmediato abre la boc

ta y húmeda. — gimió al senti

bajar mientras que lo tenía en su boca. Saboreaba como si fuera una chupeta, le en

oca sus manos en la cabeza de Alida y empuja su pene más profundo

efinitivo se había vuelto su religión, y la chica no se quedaba atrás.

comenzó a estimularse, saco su polla de la boca de la chica y

rojo. Tomo la iniciativa y se acercó a él para comenzar a desabotonar la camisa, mientras lo hacía se encargaba de tocar su tonifica

ta noche. — la risa ronca de Gael resonó por toda la h

ragos en su cuerpo. Llevo las manos hacia su vestido y lo fue levantando poco a poco hasta dejarla en u

amente este

llevo hasta tirarla a la cama, reboto u

ser. Alida suspira al ver como su jefe se relame los labios con pasión. — eres hermosa. — susurro cerca

surra llen

da, quiero escucha

la sostiene colocando su brazo encima de sus caderas ya que Alida comenzó a moverse frenét

va, los movía en círculo sobre el hinchado clítoris de