es d

e compras con Bruno, nuestra amistad fue creciendo poco a poco. Tanto así, que llegamos al punto que después del trabajo no

a del bar donde toca los fines de semana, al que iré a verlo por primera vez esta noche. En este tiempo aprendí a no juzgarlo más y solo disfrutar de l

po, camiseta de tirantes del mismo color con un escote bastante pronunciado, zapatos de tacón, y chaqueta de imita

xclamo sabie

diferente al que me tiene acostumbrada. Jeans oscuros, camiseta pegada al cuer

y todo. — dice entre risas al ver qu

orteña” no entrara en tu catálogo de amiguitas. — bro

decirte que te has vestido para secuestrar los ojos de muchos de lo

ablar me encanta…» pienso internament

mi noche de suerte?

gue a las cinco a casa y te diga buenas tardes mi amor, ¿Cómo están los ni

decir busco un hombre como tú que no se acuerde de mi nombre

amente se cierran dejándonos solos en este espacio reducido —tengo mi

cha curiosidad ya que en todo este mes hemos

o silencio y una vez que llegamos, subo mientras él sube del lado del conductor y cuando finalmente estamos l

tando mi mano y él suspir

r de ahí dije que nunca más me enamoraría de nadie. — e

mento y él pone música como para dejarme

e te acabo de contar. — me pide despué

eocupes, tenerle lastima a un depredador como tú se

moro de mi vecina. — dice de

ltar mi asombro —¿La que te pla

puedo c

después la mujer que más daño me hizo. Dicho esto, ya sabes todo, no más pregunt