Morelia

orado con solo ver a un

sin saber si lo volverás a ver. Analizando cálculos lo único que te queda es solo un 15 por ciento que algo así suceda. Pero conmigo eso

toy segura de que tiene muchas cosas misteriosas, pero fuera

ste hombre era especial, y se me encoge el corazón recordar

e nuevo. Intenté preguntarle a Maycol y simplemente me reprende por hacerlo, me di

tamente protegida. Lo único que verifiqué en las páginas web, es lo que ya me había comentado mi hermano, que él proviene de una fa

a esta situación me estaba haciendo sentir frustr

ga Lourdes, me comentó sob

es automáticamente se me prendió el foquito de las ideas locas, le cuestioné si podía postularme en una asociación en específico, c

xplicándonos de qué forma podríamos ayudar a estas personas, quizás unas palabras de áni

una pequeña mentira, aunque en realidad no es tanto una mentira, les dije que quería visitar y ver más seguido a Maycol

motor, y comienzo a organizar los platos en las enor

ería hacer cuando ya comiencen a ingresar las per

nos han obligado a utilizar para que no caiga ningún cabello en la com

van entrando. Comienzo a repartir sus platos sobre fuentes ami

go, ningu

otros comen en silencio, algunos están solos en su mundo y otros están en grupo co

ecepción, porque no sé

ado mal por eso

no»,niego co

n compañero conversando, alza la v

vestida así?». Definitiv

señora que también reparte y en donde le tocab

uí? —Me susurra, mient

ido, ¿no? Aparte te extraño y también m

to. Él trata de relajar su rostro y me reluce una s

por mucho. Ya se acercan las olimpiadas así que

en las o

n la limpieza y los almuerzos, así q

pone c

vanzar? —Un oficial s

Le apuro c

i Morelia. –

cuando de repente se me acorta la respir

iendo, pero él no me mira, solo está en la e

lentejas? —

—responde y me quedo boba, al escuchar

omo la de un

o o carne a

orque sin querer estoy c

e gira a verme con su ro

nectando sus ojos con los míos por 3 se

e preguntando tan

fuente y se va s

ivo y malhumorado»

pciono, ya intuía que p

o al resto y a la

ro. Y al menos me siento tranquila, porque sé que jamás se fijaría en mí, tal vez s

jarte la moral”, me

o todo lo que puedas

ne r

n agua, mientras veo que come solo sin nadie a su alrededor. Quiero decir, si tiene personas en la mi

les obliga a no s

lo que más concuerd

porque veo su

la comida

nto que todo está bien, solo que tiene

o le gusta

jo una jarra y comienzo a repartir más agua a todos disimulando m

gua? —Le

lemente me

me atrevo a

las están completamente roja

no come

entonces se pone de pie, sin decir nada, regres

en

irándolo mie

z del tonto de mi hermano me descon

con mala gana,

rvicios. —Arrugo mi entrecejo y trato de no reírme, porqu

pequeño roce de nuestras manos, me gi

*

. Hoy se inicia las olimpiadas en donde todos los reclusos

teador, en la universidad le decían piernas locas, porque sabía hacer confund

rdos divertidos—. Reparte estas botellas de agua a todo

comodamos las botellas para pasearnos en el enorme campo,

guardias o mejor dicho les observan a ellos. Miro alrededor y

tellas, cuando de pronto me

y me sobo la fr

—Alzo mi mirada y Maycol manti

dentro, porque por fue

n —Le respondo

de, casi no te reconozco. —Se expre

rácticament

queda completamente suelto y que parecemos bolsas de papas andante

el agua, se lo apego a su pecho co

on esa sonrisa pícara sigue su ca

eza, porque a ve

ostado en la sombra del último escalón de las banca

que no esté de dos o en grupo, en camb

rito a un lado, para subir las tres enormes grad

en

i pecho y lo admiro por unos segundos. De

una pe

to cae una lágrima por su mejilla y me quedo estup

o mis labios y me acerco lentamente a su lado, enton

anda

nso, entonces rápidamente sin importar

y descubro que, este hombre s

to pedi

pidamente y me sos

de los nervios también. Pero sus ojos siguen cer

ojos bien

Jessica?

mienzo a acariciar su cabeza para que se relaje. Su cabello es sedoso y suave, c

nmediato, al parecer por mis cari

cabo de tener una cercan

tos, pero lo acabo de sentir com

e siente dem

ientras un guardia se comienza a acercar–. No debe de haber

a entregar su botella de agua a ese chico y me percaté que tenía fiebre. Es por eso me acerqué

avisar, puede seguir con

ara seguir entregando las botellas, y desde lo lejos veo que el guardia lo termina por levantar

tiran del patio, mi angustia me mata por

algo diferente, no sé qué sucederá después, pero estoy segura que, de ah

e mi parte, si él está bien,