dre, él había encontrado una casa para nosotros a solo dos calles de la su
quí —dice Benja, mi hermano
icas son lindas —digo
dice que todas las
o tú, lo dices para poder entrar entre
an vulgar l
allá, y la gente parecía tan fuera de lugar, me encontraba solo con gente blanca, muy blanca, algunos me quedaban mirando raro, por dios, esta
ar a esa escuela —dice,
é como se muestra en los libros —digo
eres la típica n
d es tímida —digo,
mente no tienes
as perfectas, me gustaba leer, pero no era para nada tímida, de hecho tenía una person
alta, esto me hacía una gran diferencia en cuanto a Chile, en que las casas de clase media no eran para nada como esto, y eso explicaba el
cliché que en los libros —dice Benja, yo ruedo los ojos y le tiro
ce Alicia entrando en la sala, ni siquiera toco, pero nadie se s
sería si no la tuviéramos —dice, ella
ome un beso sonoro en la mejilla, luego con un
ni idea de cómo llegar —decimos co
ustedes hablan al
que era el hermano mayor, pero a fin de cuentas yo lo era, Benja aún era inmaduro, y como no, si l
somos gemelos —d
mis amigas, te agradara
presentar? —pregunta Benj
ieres de amig
y mujeres, en un momento u otro queremos hincarles el dien
ujeriego —dice Alicia, mi madre leva
ujer, ¿quieres que los hom
ier hombre que se le acerque demasiado ter
mín, es
ogía —dice rod
verdad solo dos, y uno de ellos era su amigo, había sido mi primera vez pero él era un idiota de primera, y
na noche, y eso había sido hace un mes. Hablábamos por mensaje, pero si tuvimos una oportunidad de tener algo, con este viaje y nueva vida,
gunto Alicia, yo me
—digo, los ojos de Benjamín me miraban sorprendido y lue
a, Trinita no me gustaba para nada, pero él solía decirme así de pequeños—. Por qué tomo un avión de inmediato y
, él asiente relajándose, mi madre me guiña un ojo. Ella
sea así —dice,
que quieres y yo no puedo dejar que me toque
te ningún hombre, l
ecesidad
tienes las manos y canales porno
pene Benjamín, tú lo sabes
tre un buen hombre, que yo apruebe por supuesto y de
ar —digo, él asi
fecto, entonces nu
e toma de la mano par
oxicidad de hermano —dice
vamos? —
iero que los conozcas —dice, yo asiento y me despido de
esentando hombres! —grit
Alicia—. Tu hermano no cam
nque no me lo haya dicho —
o nada c
o, coqueteaba con algunas chicas frente a mí solo para darme celos, no soy esa clase de mujer, ni quiero
sma que tú tienes, porque mi vida
e tienes que descubrir
s amigos, te voy a mostrar el cliché no
iosa por c
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ria próximamente la puedes en
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