bitación en busca de conjuntos pa
delaten mi acomodad
is dedos, buscando cosas adecuadas para despist
regaño mentalmente, aceptando que la ropa es algo demasiado b
do puede delatar los
mente a Cuba. País pródigo en manifestaciones
la mayor isla del caribe, fingie
un clima cálido y un mar ideal; pero ni él ni yo íbamos de e
do que obtendría de mí, información sobre la empresa de la que en realidad era dueña, mientras el creía que había sido
l balcón de la terraza de mi penthouse viendo como la ciudad de Madrid cobraba vida mat
o la tasa a mi lado, volví a vagar por los pensam
rba elegante de no más de los dos días que se v
te claro está, para sacarle información sobre mi empresa antes de fusio
iada, había decidido que mi proyecto, que sería pionero en la industria, no lo fus
o; pero yo también lo era en el mío y no podía de
a asistente personal, que hubiese
currículum que le preparé de verdades a medias, no pudo negar
había jugado un poco con mi nombre y evidentemente, él no lo había tenido tan en cuenta, pues me contrató enseguida, a través de su verdera asistente personal, q
a n
staba la muy tonta y lo mucho que disfrutaría ver su cara el día que supiera que yo tam
por mis tímpanos y me obligó a entrar a mi habitación nuevamente, para encontrarla soltando dos maletas en el med
sus dos mejillas. Éramos amigas tambi
las maletas y sentándome sobre una de ell
y encogiendo los hombros - no son de las mejores marcas como tu ropa, pero tienen buena calidad y por suerte, tenemos las mismas medidas, solo que zapatos si, tienes que exponerte
asi me caigo de la maleta, de las convulsiones que daba mi cuerpo
es ú
manera infantil - pero me gusta
ente hora, haciendo las male
ba mi sobrada economía, y pasaba como la típica chica que ama los zapatos y no pu
e de mi calzado pero no podía arriesgarm
mi trabajo y mantendremos una estrecha comunicaci
a las grandes empresas. Acababa de diseñar una aplicación pionera en ese sentido, y el listo de Rodrigo además de co
los por cientos en la fusión, pero aún así quería ver desde dentro, si era transparente e íntegro como decían.
algodón color crema a la altura del final de mis muslos, que combinaba con mi
io, cosa que no solía pasarme porque viaj
rozando el final de mi cintura, suelto y rebelde y
ejo, me aislaba de su fija mirada por mi cuerpo,
r de no saber quién era yo, definitivamente para mí no era lo mismo. Sabía perfectamente
también. Sin corbata y con los tres primeros botones de su camisa abiertos, dejando que su pecho revelara alguno
od
ios estaba
aciendo un gesto estudiado para visualizarme con fresc
d de su mirada, y relamió sus labios consiguiendo qu
el momento. Los otros me devolvieron un educado gesto de sus cabezas, un poc
de sus manos de los bolsillos de su pantalón, dónde am
s Lucy
a la suya y él la tomó, acariciándola de manera sutil pero atrevida p
no pronunciar mis placeres toda
to imb
ría ma
los otros tres hombres, que tomaron nue
de la otra parte del aeropuerto. Con un refrescante y podero
e, tomaríamos un vuelo privado, en uno de sus aviones q
hasta la pista. Perdiendo la clim
amente ajustado a su espléndida espalda, un culo marcado en los pantalones, me hacía perder la
? - preguntó él, medio
esté sacando mi pecho, obt
eo ya, Lu
a con doble sentido me
encantos, cosa que me fascinaba porque yo no lo e
actual jefe y futuro
scalerilla, se colocó a mi lado y puso su palma abierta y caliente sobre
o y me hizo una pregunta que
hombre aparte de
tro hombres que subían conmigo imitaran
eñor - apunté girándome hacia él, qu
í también, que si hubiera podido elegir en aquel momento, me habría encaramado a su cuerpo y lo tendría em
ciendo que su mano se estirarse hasta la otra parte de ella y
pre que te haga
ío nunca d
eseosa entre mis piernas por volver a oírlo, pero sobre todo, por sentirlo en mi piel. Tendría que se
, joder... Lu
acercó a él tanto, que tuve que poner mis manos en su pecho y, madre del
ndo me pegó todavía más, s
s gafas y nuestros alientos se mezclaban demasiad
istente en este viaj
o - dije anonadad
- pasó su nariz por mis labios con gloss transparente - así que decide aho
mos venido y de seguro no podría dejar que mi socio, entrara en mi vagina
iera que puede tratarme como
sión me m
cio personal seño
áneamente, como si lo hub
, que nos devolvieron al trato de usted, fueron
biera, asumiendo así, que sería su as
volví a escuchar hablar con aquella voz que ya
de que eso es
s también, para impedirme saltar sobre él y rodar incluso,escaleras abajo con tal d
mis ojos pasearan a su antojo por aquel cuerpo, aquel
¡