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ña absoluta de todo lo que el tiene, por Dios nada de esto me pertenece. Yo no soy ninguna criminal, no quiero tener nada de estos mafiosos, lo peor de todo es que ahora me encuentro bajando las es
¿¡NERVIOSA!? ¡Estoy secuestrada y obligada a casarme con alguien q
por aquí. -Digo entre dientes con
vivirás llena de felicidad. -Sonríe y ruedo los ojos. Obvio voy a vivir feliz al lado de un delincuente, no pasa nada total, a ninguno
y casarme con tu hermano. -Mencionó con ironía. Los pobres hombres tienen cara de aterrados, y como no si to
pero tranquila que no los vamos a matar. -Contesta y niego. Claro eso me deja más tranquila, el hecho de que me voy a
amos acercando a donde se encuentra Ruggero, Valentina, Carolina y Michael ta
o. Ruggero sonríe sin mostrar los dientes y toma mi mano, Si filiz cla
muy sexy y su porte de hombre serio me excita un poco, pero solo un poco porque a parte de todo esto quiero matarlo y poder escapar definitivam
do frente a mis ojos y porque más que busque que error, que maldad o que mal acto cometí no encuentro nada, esto es una tortura. __Señor Ruggero Pasq
-Contesta y m
sted como esposo al señor Ruggero Pasquarel
á lleno de psicópatas así que... Aceptó. -Comento sin dejar de ver a Ruggero. Su m
favor. -El primero en firmar es Ruggero. Al termina me entrega el lapicero y lo tomo de mala gana par
o. __Padre Carlo por favor comience. -Ordena. El pobre hombre asiente nervioso y da inicio a esta gran farsa, nuevame
a salud, en lo adverso, el la riqueza y el la pobreza hasta que la muerte los separe? -Lo miro fijamente. El hombr
rro cabizbaja. El pa
novia Ruggero. -Ruggero se acerca a mi. Levanta mi mentón con delicadeza y planta un suave bes
n la mía. Una lágrima se escapa pero la quito con rapidez. __Aho
o, solo quiero subir a mi habitación a descansar, ya obtuviste lo que tu querías, estamos cas
te lo haré pasar está vez. -Advierte
arol ¿A
a la cama y lloro, lloro como si no hubiese un mañana porque he perdido, perdí mi vida y eso no tiene vuelta atrás. Media hora más tarde decido toma
a ser verdad. Estaba tan bien aquí sola, la loca idea de hundir
Lo oigo suspirar y lo observo, se inclina
ntes mal dímelo y haré lo posible para hacer que te sientas bien. -Susurra con ternur
da. Sus manos de dirigen a los botones de su camisa
rdad es que yo también estoy algo ago
u si quieres. -Hago el intento de levantarme
te desnudo, me pongo un poco hacia delante para darle espacio, el entra y se pone detrás de mi, un escalofrío me recorre todo el cuerpo, su cercanía me pone muy nerviosa. __Ven mi amor. -Rodea sus brazos en mi cintura y me abraza a su pe