ara las clases, estaba a punto de tomar un taxi cuando mi celular empezó a sonar, lo saqué de mi bolsa des

ol

har su voz y me quedé totalmente muda mientras él sig

y fue ahí cuando reaccioné y Colgué de inmediato, guardand

staba faltando, todo dio vueltas a mi alrededor. Maldije cuando me di cuen

rostro sobre sus manos haciendo que lo viera y empezó a hacer ejercicios de respiración junto a mí. Me asombré mucho cuand

ie. Me sentí muy avergonzada debía pensar que era rara—. Yo.

solo dime si ya estás mejor. —Asen

ive

e había ayudado en un momento tan delicado como lo era este, lo sentí tan íntimo que p

a a la universidad y me volví a sentir tan tonta

e preguntó encogiéndose de ho

a clases? —Bufó

er... —Su semblante

ra la responsabilidad de cuidarme, ya había hecho bastante p

algo confuso, no se veía la clase de chico que se preocupara por alguien más que no

corriendo a lado opuesto de la acera. Su semblante y actitu

los chicos estaban ya dentro del salón, en sus respectivos asientos y toqué la puerta muy apenada por llegar tarde. El profesor Stinki me observó con su mirada cansada y solo movió su c

que no vendrías —musitó kar a mi lado mientra

acíos, era el lugar que solía usar Oliver las veces que asistía a clases, las cuales eran escasas. Me preguntaba como era posible que aun lo aceptaran en la escuela, cuando estaba casi segura que sus asistencias deb

reguntó curioso mira

—exclamé entusia

¿Esa clínica no le pertenece al tío de Oliver? —kar entornó los ojos, se quedó callado por unos seg

itri rio—. ¿Él también trabaja

r tarde a mi clase se atreve a poner el desorden. —El profesor me miró serio y yo quería hundirme en mi

idar la conversación de hace un momento. Ahora caminaba entre los pasillos

o. —Me encogí de hombros y frunc

abrazó a su novia por los hombros mientras s

miró — ¿Qué lo habrá hecho cambiar de opinión? —En ese momento, kar soltó un bufido y caminó más rá

ano cambió de opinión respecto al trabajo. —Ambos se me q

Oliver tenía cierto interés en mí, pero yo no lo estaba de él. Tuve que reconocer que era muy atractivo, sexy, con aquel aire de chico

idiar en ese momento, era mejor mantenerme alejada de Oliver lo que más pudiera y estando en el mismo lugar de trabajo, al menos espera

do en la mesa que siempre ocupaban, con una manzana y una botella de agua solamente. Dim

lado, asustándome. Lo miré de reojo, estaba sonr

ro si a desayunar? —Lo c

ceja incrédula y ordené un emparedado de jamón y queso

tener respuesta de él, se notaba inerte, mirando detrás de mí y luego como si nada se acercó más,

ó que nos diéramos prisa en caminar, estábamos obstruyendo la fila. —Oliver sonrió ante mi son

ua antes de darme cuenta de que Lory y Sam

rlesco con una ceja alzada y yo no sabía de qué hablab

hablas. —Lo mir

a son novios? —Mi rostro

yo no hicimos eso.

nces recordé el ligero acercamiento que tuvimos, tal vez desde el lugar donde nos estaban viendo podría parecer un beso, pero en realidad nada de eso pasó. Iba a replicar, explicando lo sucedido, cuando D

a lado de la peli rosa, Oliver estaba justo enfrente de mí, comiendo una bolsa de papas, no me quitaba la mirada de encima haciendo que me sintiera incomoda y aún peor de lo que ya estaba. ¿Qué quería ganar con hacer eso? Me sonrió burlesco, com

n sus cosas, a excepción de Lory, quien nos miró curiosa, o traté de c

cambió totalmente, haciendo referencia a la que puso cuando tuvo que dejarme en medio de la acera, después

ormado en su rostro. La palabra extraño era habitual en ese chico y preferí no preguntar algo que no era de mi incumbencia. Todos se quedaron callados por unos segundos y mi