ENTREGADA A LOS PLACERES DEL MILLONARIO

decir dominante hombre. La abreviatur

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Una barra separadora me niega la capacidad de cerrar las pie

otros sentidos y hace que la escena sea mucho más intensa y placentera. Me conc

e sus piernas vestidas

á c

y descenso de su pecho mientras

ro hasta el lugar justo detrás de mi oreja. Sé que no debo hablar sin permiso

aliento abrasa

ente, sabiendo muy bien que no me ha dado permiso para hablar— ¿Quieres saber lo que he planeado para ti esta noche? ¿Quieres saber qué c

ha encontrado

illas en los marfiles, toma mi pezón izquierdo entre su

irando y mamando mi pezón izquierdo, pellizcando y tirando del derecho, cobran vida, alarga

abio inferior y ahogo un gemido mientras siento que las pinzas se clavan en la carne de mis áreas más sensibles. Tr

hace que una corriente de deseo

o extremadamente húmedo e hinchado, ha

ina caliente está goteando por todas partes. Eso no es educado ahora,

tiene la intención de hacer

ran mis manos empapadas.

e abro mi boca para lamer sus dedos y aunque

y picante de mi excitación en sus dedos. Tengo cu

dedo en mi boca y lo escucho jadear. Él aprieta mis mejillas y tras obligarme

as muerdan más profundamente en mi carne. Aspiro un suspiro sobresalt

eración tan temprano en la escena. Trato de pensar ocupar mi mente en otra cosa y vitar

quejo por la pérdida. ¡Él me tiene donde me quiere: desenfrenada

juegos. En mi estado de frustración sexual me retuerzo en mis ataduras, haciendo que las cuerdas se

el caso—, su voz de terciopelo es tan tranquila pero dominante, que tengo que luchar para no eyacular solo por sus meras palabras—. Creo que para

o con mi trasero desnudo solo sirve para intensif

tu put no quiso mol

a cuando

ntrol que solo él po

s entre mis dientes, y cuando lo hago, adviert

ato son interrumpidas por aquella sensación áspera y a la vez excitante de una profunda lamida en la parte interna de mi muslo

te jodidamen

juguetona de su lengua. Estoy fuera de control de este cóctel

o de saliva en mi cuerpo, mi

pero aún no

stá pasando por alto la fuerte

a y su respuesta

lor somos? ¿Somos

o la cabeza en confirmación

. A quién demonios le im

con racionalidad si se está tan excitada? Toda

mi monte de venus. Muerdo mis labios para no romper con esa regla fundamental

iendo, lleva la fusta a mi vagina, a

que

emas

razade

cuer

engu

fus

por co

ir permiso para eyacular

sación. Afortunadamente él conoce mi cuerpo. Él

lo me sobresalta, e inmediatamente soy asaltada

en pura euforia. Nunca me he

esa maldita cadena. Quiero escucharte deshacerte en mis bra

decírmelo

—le supliqué. Mi vagina hinchada y extremadamente excitada d

martillo neumático, sin mostrarme absolutamente ninguna misericordia

se siente como si estuviera

gos cuando su pelvis chocó con la mía. No pude aguantar má

s tan caliente mujer! —gruñó a través de los

ñor no pare… No pa

el subespacio, co

uieres?

vez más profundo. Llenándome y vaciándome una y o

ró

ujó

ró

ujó

blina eufórica, todo sentido de la

—Si dependiera de mí, estaría ahogando su miembro

, antes de sentir las lágrima

a de mi clítoris, me

Hazlo ahora! ¡Termina para mí! — ordenó s

n aliento, pero él no se detuvo ni un segundo. Continu

lando dentro de mí,

músculos de mi estómago

abrazaderas y vuelve a dar la orden—: Otra vez Clara ¡Dios, eres un

po. Es como si reconociera su voz y ante ello no soy

con mi segundo orgasmo. El segundo

s veces más antes de explot

, cuando la compuerta se abrió y

lozos que no podía c

ito otro l

vez e

molestó en desatarme, simplemente cortó las cuerdas. Parpadeé tratando de adaptarme a la suave

eridad de sus palabras. El momento me dejó tambaleándome con más emoción. La evidencia de su aprobación y el placer que había recibido de la escena de esta noche también se ref

i clítoris palpitaba por mis poderosos orgasmos. Con la enorme cantidad de residuos pegajosos en

ie

o que acababa de tener y no pasé por alto la imagen d

Tan deseado