a una fuerte migraña. Ese mismo día, se cumplía un año desde que su hija y nieta fallecieron. A pesar del dolor y el cansancio,

todo bie

da. — Genevieve abr

ebería esfor

o — la anciana se

voy al mercado. — dijo Evelyn, mostrando una sonris

zaba un trabajo extra para ahorrar dinero para el tiempo que pasaría descansando después del nacimient

miró el vientre de Evelyn, que empezaba

la posada recibió pocos hués

ita algunas verduras y hortal

a buscar. Prome

uidado,

Evelyn se detuvo al toca

— La sonrisa se amplió en

¡S

ueño ser moviéndose en el vientre de Evelyn. No sabía cómo expl

▃▃▃▃

amente mientras los restaurantes comenzaban a abrir sus puertas

servilletas de tela, listas para recibir a los visitantes ansiosos

l tímido comenzaba a fortalecerse, esp

gente, incluidos los de la joven Evelyn, que ya había entregado las bolsas con la ropa bordada y reci

con la mujer alta y cayó al suelo. Ese rostro claro y el cabello del colo

or dónde cami

beza, temiendo que la

oner en la cesta antes de ponerse d

ó las manos en el bolsillo de su abrigo rojo. — Por tu culpa, mi prometido vive triste por la hijita que mataste

ulpe,

ras y hortalizas frente a su vientre,

lejada de mi prometido o convenceré de que te enci

bellas, ¿qué hacía una modelo tan bonita en Marsella en lugar de estar en París? Nunca imaginó que algún día se topar

en prisión. Aunque intentaba contener las ganas de llorar, su rostro se volvía cada vez más rojo. En el

h y sus acusaciones; pero todo colapsó nuev

eve apareció en el salón y se

có las lágrimas con l

—hizo el comentario. —¿No

lyn. — Yo tropecé en la calle y tu

ndiera si le contaba la verdad sobre el e

lamar a u

erá ne

cómo está el bebé —

▃▃▃▃

n lugar de volver a dormir, Nathan decidía trabajar hasta que el sol anunciara una nueva mañana. Nece

do para un premio a lo CEO que demostró excelencia en innovación y crecimiento empresarial. En su interi

inido. Su prometida lucía un hermoso vestido de seda rojo con un elegante y fluido ajuste. Mostraba el escote de sus senos d

gancia en la premiación —la mode

a de uno de los mayores empresarios con los que había hecho negocios. Dio

ber que Evelyn lo veía con varias c

r que siempre estaba posando para algún fotógrafo. Después de recibir el premio “Exce

tras intocado y tom

s que celebrar — Julie d

ionaba suavemente el escote de Nathan, estimulando su miembro. Carraspeó

z sonaba más ron

a rápidamente hacia la limusina. El señor Relish entró

arnosos de Julie besándolo en el cu

o la limusina se detuvo en el

rió la ventana para investigar mejor cuando la joven embaraz

e maldito au

e aquí, señor Relis

a esta mie

a cuadra del lugar donde p

al hotel

pondió br

? —Ella lo sujetó del

al hotel —

regresar al lugar. Miró la tienda al otro lado de la acera y antes de

ado! — le lla

adie que se pareciera a Evelyn. Entró en la tienda de bebés y caminó de un rincón a otro, pero no la encontró. La miríada de sentimientos estaba confundiendo su mente. El señor Relish estaba pr