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Historia

Capítulo 4 El padre

Palabras:1911    |    Actualizado en: 27/02/2024

o 4 “El

a P

a ver que carajos quería Jorge, entonces fui corriendo algo distraída. Cuando llego no veo a Jorge y por ninguna parte y me desconcertó; e

garganta, lo guio tomando su rostro con mis manos y durante unos segundos sentía como una leve corriente hace más débil mis piernas. Estaba disfrutando esa sensación de vulnerabilidad y a la vez me sentí

—susurra Jorge mirándome a tra

ue desilusión —le dije mientras él a

guntarte… —responde, pero no lo dejo te

inda” ni me insinuó a ti eso no te dice nada? —l

a mandado al diablo… ¿Por qué Jorge?. A él solo lo estaba utilizando para avanzar más rápido en este mundo universitario y ahora debía disculparme

o sentir ese beso, pero no en público eso estaba mal, yo no puedo permitirme manchar mi reputación de buena estudiante y joven juiciosa por un simple beso. Antes de subir observo el mercado

ué deseas esta noche? —e

olate blanco —le respondo apoya

me da los chocolates en una bolsi

vemos —le dijo mientr

alguien manipulable y fácil. Su rostro es poesía cada vez que

n chocolate blanco en bebida y me observe en mi espejo grande y detallaba cada parte cada lugar de mi cuerpo sin criticar nada, tengo esta extraña costumbre de observ

nes en público me parece bien. Tome un cuaderno y comencé a escribir todo lo que me había pasado hoy mientras tomaba mi chocolate de a poco, siento fluir mis pensamientos libr

sigo escribiendo, luego llega otro mensaje, per

ar esta noche? —me

arda en responder y me lleno de incertidumbre. Me bebo el chocolat

y la extraña sensación de debi

cas para hacerle sexo oral —le respondí

ba probándote —m

s circunstancias

rte en persona? —no supe que re

rés

n gran fastidio debo reconocerlo. Estoy camino a la oficina de mi padre pasando por el inmenso

igo en tono firme cuando

desde su asiento mientras su a

facultad que afirma que usted la llevo obligada a su departamen

licar que suc

a es aplacar a la chica qu

adre levanta su mano

er una idiotez como tratar de violar a una simple muchacha. Recuerda Andrés las cosas más simples te meten en probl

do dos pasos hacia atrá

yor a quien concibió solo por obligación y deber como lo dictaba su tradición italiana. Mi familia una cueva de lobos hambrientos donde solo existían para obedece

os 16 a quien le regalo a mi abuela en cuanto nació. Mi querido hermano Walter que contaba con su intacto sentido del humor mi padre lo apoda el nomo siento que es un gesto de burla o de

ra

lguna cosa? —me dice Kare

on agua por favor

en me recuerda lo frágil que soy y en q

le digo observando sus pestañas largas que miran al su

sperando

estrellas que me cubre entonces me siento en el piso de esta fría terraza y me pongo a imaginar. Si imagino con una vida diferente llena de libertad ciertas lib

mos detalles, pero solo le inventaba cosas estúpidas que creía como un niño. Mi reloj marca las 9 pm y hoy no quiero ir de fiesta sol

breta de notas aquí en el suelo de la tienda ¿puedes venir

ar mi chocolate y dejo el celu

edificio, pero un escalofrío helado recorre mi espalda baja no me explicaba por qué si esta noche tod

al hacerlo veo de lado que un hombre sombrío me

ugar —me dice Jorge con una media sonrisa expresión que para mí significaba que leyó algo d

ante que es para mí —le digo con una enorme

oportunidad para darte esto —me mue

s la co

amos —me d

reflejan belleza en este instante veo su brillo natural atravesando su iris, cuan

l viento voló y sacudió mi cabello —me dice la vecina de

a punta de mis zapatillas y al

tie

eno que tengas b

del edificio para entrar, yo detengo la puerta y subo por las

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