ro nuestro matrimonio perfecto era una mentira, sin hijos por una rara condi
ropuso una solución: una madre sustituta. La mujer que e
ó mi cumpleaños. Olvidó nuestro aniversario. Intenté creerle,
funda, pero con Sofía... es fueg
villa que me había prometido a mí. Le estaba dando una familia,
bsoluta que se sintió
lo había escuchado todo. No sabía que mientras él planeaba su nueva vida, yo ya estaba planeando mi escape. Y ciertamente
ítu
VISTA D
construido con el mismo cuidado que usaba para dirigir s
esos. Su mano grande y cálida cubrió la mía. "El linaje De la Vega... está maldito. La Diosa Luna se llevó a mi madre
amaba, así
como cerraduras antiguas encontrando su llave. Acepté mi papel como su "Compañera por Pacto", una alianza política, una
mosa mentira comen
y desaprobación. El Anciano De la Vega, un hombre cuyo rostro era un mapa de decisiones
o. La manada lo siente. Esta manada necesita un heredero. El linaje necesita un heredero. Tien
spendida en el aire
e y frío. "Un Ritual de Fusión de Sangre. Es una forma antigua, pe
ración. No había dis
", añadió, finalmente mirándome. Sus ojos, usualm
anada más pequeña y en apuros, y se parecía inquie
licó Bernardo en los días siguientes. "El ritual será agota
as tardes en el departamento priva
ido fue cancelada con un breve mensaje de disculpa. *Sofía está te
che. Justo cuando estaba a punto de rendirme, un susurro llegó a través de nues
iversario
presencia. Solo palabras en mi
ntira se hizo añi
n una carretera desierta. Su hedor, una mezcla de desesperación agria y locura, llenó el aire. Luché contra ellos, mis garras ras
y yo estaba cubierta de arañazos. Busqué
e necesito.
enc
por favor! ¿
ico, un muro frío en mi
n mi pecho. Mientras me acercaba a nuestro penthouse, otro olor me golpeó, transportado por e
l de Bernardo debió haberse deslizado por un segundo. Un pensamiento perdido, un a
ma, un puerto tranquilo. Pero Sofía... S
casi cediero
ella. En el Terreno Sagrado de la Diosa Luna, el lu
iba a inspeccionar la frontera norte esa noche. Pero una notificación brillaba e
ra cita de esta noche! Ele
plemente se detuvo. Se convi
ad que las manadas pretendían que no existía. Me acerqué a u
: "El Santuario
as desaparecer. Y esta noche, me di cuenta de
-