ista de Ay
que me había mostrado amor incondicional. Recordaba la historia que solía contarme sobre ella, cómo se la había dado su propia ma
desechada. No podía comprender el concepto de valor sentimental, no cuando no venía con una etiqueta de precio cons
edor de basura. Su rostro de porcelana astillado, ya desvaído, ahora parecía mirarme con un reproche silencioso. Estab
mi aturdimiento, aguda e imperiosa. Se había acerc
abios se separaron, pero no salieron palabras. Tenía la garganta apretada, ahogada por un dolor tácito. Traté
, enlazando mi brazo con el
, un intento desesperado de sonar indiferente-. ¿Fui lo suficientemente rápida? -El e
rometedor. Su mirada se desvió hacia el
Absolutamente nada. -Su voz era baja, i
de la muñeca de mi abuela, enterrada en lo profundo de la basura. Tragué
urro. Me aseguraría de que no quedara rastro de mí, ni un aroma p
tía hueco, estéril. Unos días después, llegó una entrega. Cajas de ropa de diseñador, joyas caras, un bolso nuevo. Todas las cos
que esto es para tu gra
. Un adiós dorado. Estaba comprando mi silencio, mi fácil partida, envolviéndolo en seda
, mi voz cuidadosamente neutral-. ¿Y dón
luego se acla
negocios para asistir al concierto de la se
supuesto. Sería la última vez que lo vería. La última vez que sería su
espero que disfr
rís. Un asiento pequeño y caro en la última fila. Necesitaba verlo. Necesitaba presenciar el acto final de esta ob
Karla estaba animada, quejándose de un nuevo científico de datos de n
ya me ha hecho sentir como una idiota dos veces. Carlos Flores. ¿Has
evolviend
ece que has encon
s, ¿qué vas a hacer este fin de semana? No seguirás volando
endo a mis mejillas-. Esperanza Vázquez va
los ojos
anista terrible de todos modos. Pura apariencia
el fondo, que ir a este concierto era un acto masoquista. Era el paso final para desprenderme. Un exorcismo doloroso. Pero lo necesitaba. Necesitaba verlo, verlos, una última vez, para entender com
ban. Me deslicé en mi asiento en la última fila, mi corazón martilleando. La sala estaba llena, un mar de rostros elegantes, todos esper

GOOGLE PLAY