Monte
tido devoto a la perfección, sus muestras públicas de afecto eran repugnantemente convincentes. Yo in
blico. Después del frenesí mediático inicial, la familia Morales, una dinastía d
ojos recorriéndome con un desprecio no disimulado-, difícilmente es la pareja adecuada para
fendido, públicame
e. Ha pasado por una terrible ex
Una actuación calculada, diseñada p
Carlos el acceso al fideicomiso familiar, amenazaron su posición en el corporativo. Me
mante desafiante, dispuesto a sacrificar todo por la mujer que "amaba". Montó discusio
ica, estaba diseñado para provocar a su familia, para desesper
aciones apagadas de la familia Morales. El amor de universidad de Car
r con él, ent
té una noche, después de una pelea pública particularmente
ojos fríos
juntos en esto. Sobrevivimos a alg
dosamente construida. Podía sentirl
bía dejado sola en nuestro enorme penthouse, alegando que necesitaba "enc
La puerta estaba entreabierta. Un bajo murmullo de voc
a, tiró de mí. Me acerqué sigilosam
ndo genial, Carlos
e y melódica. Ju
Contuve la respiración
e dientes, un soni
ogarán que me cas
vo. El aire aban
ahora teñida de una
o que está cumpliendo su propósito. Una
eté las manos, las uñas clavándose en
s, desprovista
. Una vez que acepten nuestro matrimon
y clínicas. Retrocedí tambaleándome de la puerta, mis
tro montado. Era una
n. Me congelé, apretándome contra la p
s de nuevo, más
e? Sigue re
spiró jugu
igues lo que quieres, cariño? Especialmente cuand
mi padre? ¿De qu
atrimonio, usando a esa chica Montes como su propia distracción. Pensó que
me heló. Mi p
e repente. Jadeé, tr
l verme. Su rostro, usualmente tan compuesto, fue desp
rdiendo su calidez fabricada,
Un nombre, un nombre que no se había pronunci
uli
recatada en una bata de seda. Sus ojos, usualmente tan suaves, ahora
ando una dulzura falsa-. Qué
cara de nuevo, pero el temblor en sus manos, el
ré, mi voz cruda, rota-. Todo. El secu
e miró, sus ojos com
o adelante, su son
dad pensaste que alguien como Carlos estar
nido frági
trevido a tener esperanza, se hizo añicos en un millón de pedazos. La humillación, e
una rabia repentina y devoradora. Mis manos se
me, cortó la neblina. *No
El heredero de principios. Todo una fachada. Era un mon
ciosa novia. La mujer que secretamente movía los
rga escapó d
o, Carlos.
mente firme, una calma
, un destello de algo ile
lemos. No e
e un desprecio helado-. Fui un peón. Una distracción conveniente. Una p
se rio t
ida para
is ojos fijo
omo una especie de mercancía dañada,
ima palabra, pero me negué
paso ha
quise que sali
abusando de mí. Me hiciste suplicar ante la cámara. Usaste la ambición de mi pa
, cruda de incr
. Bien. Que s
ana, una sonrisa ve
tima" de la gran y malvada familia
risa v
ujerzuela, un juguete desechable para ho
gre me
umor-. Mi lugar está muy lejos de ustedes
Mis ojos se posaron en un invaluable jarrón de Talavera, sobre un pedes
haciéndose añicos en mil pedazos, el
os j
¿Qué está
mesa cercana y la arrojé contra un cuadro
voz cruda por la furia desatada-. ¡Estoy borrando tu
u escritorio, haciéndolos triza
ro me aseguraré de que no quede nada
dose. Carlos se abalanz
Kiara! ¡E
los suyos, ardiendo con un f
volviste así! ¿Y sabes qué? Lamento cad
ojándose, un destello de algo qu
uelta para irme. Mientras me alejab
basura, Kiara. Nunca
recorrió, dos figuras congeladas en su engaño. Un
s un susurro, pero infundida con una promesa escal

GOOGLE PLAY