Ross

solo una sensaci

o vibrante

ndor blanco de las luces fluorescente

una unidad

ra ensordecedor, un ritmo caótico cont

ntras una enfermera cortaba f

tro nadando en foco sobre mí-. ¡Quédese co

qué pasó, pero solo un gemido

iertos por la urgencia-. Está embarazada. Ocho semanas. Pero el

ara

s de la niebla de mi men

b

ered

da y feroz, se encendió en el

gre de la reserva privada de Moretti! ¡Su tipo

pués, con el rostro pálido, un telé

Don... el señor Moretti ordenó sellar el

ico-. ¡Se está muriend

o el médico marcaba, ponía el a

mesa! ¡Necesito el código de desbloqueo

abitación. Era fría, dista

llanta. Está sangrando mucho. Mantengan la reserva para ella, por si acaso. Es O-

crítico! -suplicó el médico, su

dad. Esa es una orden.

ea se

sala de trauma fue más fuer

ho no solo se desva

no la mía, sino la pequeña y frág

rutal desgarr

liente y húmedo e

nfermera, con lágrimas brotando en

los

rque mi alma acababa de romperse

bía e

en ella, había sacri

de nuevo, y esta vez,

lo

sangre genérica de donante, me

ntía

andante sin

y saqué el Libro Negro. Milagr

letra era firme: una sentenci

a nuestro hijo. Menos c

vías intravenosa

óleo, puntos rojos brillantes marc

i ropa su

ital como un fan

estudio y dejé los papeles de divorc

de ellos, dejé

de la vida y de

citado de entre los mu