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ido con una bolsa llena de secretos delicados de uno de los cabecillas más grandes del cartel. Estoy en un jet privado junto a un asistente del tal

rdomo cuando ingreso a la mansión de mi jefe, e

ertas y todo está lleno de guardias, simples anillos de segur

ca, mi francotirador idiota de 30 de origen Francés, mis ojos en el campo Andrew de 19 hijo de una de las sirvientas y

creíamos muerto —exclama

or y pensamos lo peor —se levanta Lia mi

sacar al objetivo, yo me cuido solo —les digo con firm

dicen todos al

me con Sacha que está a mi lado analizando el artefacto que le quite a C

guardias en las puertas, claro te

de los tantos rostros conocidos de esta fortaleza al mismo

esta muerta ser atado a una silla metálica y en una esquina

chica de traje ajustado y oscuro dándome una caja de madera, la tomo y co

de los hidromasajes. Destapo la caja para encontrar un collar de oro y diamantes incrustados, recuerdo que le pertenece a mi hermana Milla a quien veré muy pronto gracias a este encargo. Mi mirada oscura se

sa

de lado a lado en mi pequeña y humilde habitación, escucho pasos, pero sé que es uno de

éfono y deja el maletín al que está conectado en el suelo, m

quien

l señor Brown —enseguida escucho como int

a ¿er

r así que deja de buscarme porque asu

protección y más con tus conocimientos, vuelve y ha

N

gas más adelante

enorme de la propiedad. Sangre eso es lo que me quito del rostro cuando la explosión ensordece y todo es más lento, estamos en shock, pero aun así me levanto para proteger a mis hermanas de ese pequeño enfrentamiento, cor

se vuelve oscuro tan oscuro que ya no puedo escuchar, no puedo oler ni sentir las manos que tratan de levantarme, soy una simpl

ejilla y una lágrima sale de mí como si pudiera tocar aquel momen

es o no recuerda mis palabr