QUIÉREME, SÁLVAME

alabras, la manera en la que me tratas y el amor

TUALI

de lo más alegre, exhibiendo a todos los invitados mi buena noticia. Poco después la casa se fue llenando más y más. Habí

a decir novio y f

prima mía, de la mano con Nicolás, mi ex algo. No consigo acostumbrarme, se ven extraños juntos, ella

tado en una relación con su actual pareja. Me si

se aleja hacia la planta derecha para la cocina. Supongo que tiene antojos, así como tambié

avecina n

la cocina, donde también se encuentra él, y como toda pareja preo

í; una camisa blanca doblada hasta los codos y desbotonados los primeros tres del pecho dejando un poco de piel al des

lándome una de las diez copas que se

o de volca

s —replico mirando

a salió de

bien—. Su vista recorre lentamente todo mi cuerp

uer

e mirando hacia mis piern

Dios ahora sí —dig

ivertido sin quitarm

o no me dijeron para qué —cuestiona,

Sorprendo airosa, obvian

ás se volverán a casar —

manos y las de Ben me reciben gustoso. Su sembla

e mostrándose desanimado. Cabe destacar q

amor? —pregunto

los invitados llegan—. Como siem

os faltó agregar sin mochila —objeta Ben,

oy yo —contraataca cí

n —ignoro la actitud so

guida, ¿vale? —la incomodidad por de

espido gu

de arriba, no sin antes dirigirle una mirada asesina al acompañ

rar como se debe n

de jodernos la existencia —ataco al

años —ruega, porque sí, si es un ruego —una última oportunidad, solo una úl

ser alucinante, y no por escuchar aquella confesión que me ha repetido miles de veces, sino porq

ieres recuperar, para que lo vuelvan a