m

r en una universidad. Me siento contesta por este nuevo mundo al que me adentraré, contenta por poder arrancar con eso que pospuse por uno tiempo por la depresi

». No estuve ahí presente oyendo eso, y qué bueno que no porque hubiera perdido mi dignidad llorando, así que no podía creer que esa interpretación de mi amigo fuera cierta, pero esa diminuta partecita mía empezaba a llenarse de esperanzas, las cuales fueron atacadas

s durísimos para mí. Además, mi estabilidad emocional desde que empecé a salir con Aiden no era la mejor de todas. A veces me acuerdo de cómo me comportaba antes de estar con él y echo de menos a esa Emma, siento que estos años sin estud

rguenza usar colores fuertes en los labios o alguna sombra en los ojos, pero hoy esa pena se iba

bial —la voz de James

spejo. Estaba cruzado

sto para ir a la unive

no

estás

N

te f

—respondió—. Teng

nr

pero bueno, no nos queda

rlo. Sin importar cómo te vean los demás. Tal vez

.. Solo

ogo. Estaba ansiosa por ello, necesitaba consejos para superar lo de la otra noche. Noche que, por cierto, fue tan mala que, al llegar, me metí en la cama a llorar. James fue tan amable de quedarse co

esde la mini cocina que te

n clases introductoras, así que esperaba no terminar muy

ba, por lo que nos despedimos con beso en la mejilla y nos deseamos suerte. Terminábamos a la misma hora, po

no la encontraba. Cuando me metí en el lugar correcto vi mucha gente en la clase, y muy poc

con la Emma tímida de siempre

ió amab

ue ella era igual de tímida que yo y que me había sentado en el

y E

sa como yo? Soy nu

mbién soy nueva, lleg

con alguien, suelo ser muy tím

actamen

son

a iba a lle

do hacia la entr

en la misma dire

ntesté. El camarero caminó al lado de la sección en la que estaba sen

ta el chico

s el camarero, no hemos hablado na

quí —dijo, y sí, parecía qu

e me puse

vacío a mi lado y se sentó, sin darse cuenta de quién era yo.

acerca de lo que los demás pensaran. ¿Debía hablarle? ¿Mi sociabili

ablarme o algo por el estilo, sino porque yo me le había quedad

—me

a —tart

ientes

ntes que quería salir de esa fila para sentarm

ado viendo —sonrió. Yo

se co

el chico del resta

el restaurante. La cl

viosa e incómoda. ¿Podía hacer una excepción a mi reg

—dijo mi compañera a mi lado, en voz ba

do con las personas. N

nsar que sí

ra hacerlo. O tal vez sí... Me lo

, en vez de captar mi atención, captaban mis ganas de dormirme. Eso me molestaba de mí misma, era algo normal y que a muchos les pasaba, pero me molestaba. Me perdía de cosas que podían llegar a ser importantes. Lo intentaba, intentaba

me dio un codazo.

dio alto. Creo

chico a

hacer un trab

dije con

ntos —repitió, sin mirarme. Tení

n qué mom

que estabas durm

rmiendo —me d

puedes preguntar a

or

aía la bab

Qu

é di

a el trabajo. Debemos hacer una encuesta. T

instalar. Para mi mala suerte, mi teléfono ya no tenía datos. ¿En qué momento me quedé sin crédit

da —m

o? —preguntó

Bueno

decir qué e

dé si c

pasa nada. Pued

stia —dije. Dios, ese c

durante mucho tiempo. Mi intento de mejorar esas cosas estaba siento medio derrumbada

e hacer y necesitas tener la aplicación en

as—. ¿Ciento veinte? —mi lado

s para conocernos mejor.

pero por cómo me miró

con quien tienes al lado, pero si

e no. No me moles

eso a

s simpático en

, en serio —qu

ue instalara la bendita aplicación que contenía ciento vei

untó al mismo tiempo en qu

aba de tildar

níci

aré —a

no estaba sien

ndido y me pidiera la clave. Sentía la mirada del chico so

a una en la que estaba abrazada a James y sonriendo. Ese día habíamos estado en una fiesta en Bra

le sonreí.

zante. Kendall se iba a p

r con la encuesta. Mientras él respondía un mensaje, eché una rápida mirada al grande salón en el que es

enzo yo. Vamos haciendo

en

? —preguntó—. No

ell. ¿Tú co

espondió. Lo ano

así se llamaba

Ed

e. ¿Tú? —l

iempo antes de comenzar la carrera? Tienes qu

universidad —contesté. Sentí un efímero nudo en la garganta. El solo mencionarlo me dolía—. Hasta ahí dejaré la respuesta.

ra que lo encerraran? Rio levemente—. Bueno, no te esfuerces en ocultar tu sorp

mero. Seguimos con la encuesta. Algunas eran

estás en par

nta de universidad

o

o está en l

e coloradísima pero sonreí. Él tamb

sabía qué estudiar, y me llamó la at

s suele ser pesado. ¿Estás segura d

ncogí de hombros. Él se quedó pensando en e

ino teniendo mi propia empresa en unos años. Suena gen

iste ot

ió a encogerse de h

la inseguridad que hay, pero podía darme el gusto de salir con Ashton. Me parecía un chico lindo y con una

tonc

en

laro q