con el tal Alexander! ¡He estado esperando por ti mu

i madre tamb-bién murió en el otro! ¡Mi hermano y yo qu

u cuerpo mientras buscaba aire desesperado y se alejaba lo más

?—le miró irónicamente aterror

más al fantasma y agregó— Mi hermano y yo t

erado—¡Sí él de verdad murió! ¡¿Por qué

venir por ti, que estás en el limbo. —teorizó ya más tranquilo, se s

a abrazarse a sí mismo, las lágrimas que caían por sus mejillas eran extrañamente negras —No quiero quedarme aquí por la maldita eternidad...

e desvincularse del fantasma puesto que le destrozó el alma al arrebatarle

adre, su padre quiso que le llevara a ese mundo

le nace del alma entregar a su criatura, ese amor de padre que su padrastro sí le daba a su hermano mayor, y a él mismo en varias ocasiones cabe destacar. Su madre sí lo quiso, lo trató con cariño todo el tiempo que su traba

la ignorancia a la que fue obligado a permanecer, cuando habían tantas personas q

Joder, era liberador. Tenía una versión más clara de su vida, una imagen verdader

u alma y nunca le nació ser alguien que le hiciera mal a los demás, así

arrugada de su bolsillo—Eres casi idéntico a él...—susurró, y se la mostró, se sorprendió, por fin puedo dar con una imagen de su padre, y se sorprendió de sobre manera, era como ver

ca pensé que tendría que verme en un espejo para pode

cía la ventana cómo la luna, amarilla en esa noche en

el menor em

noche, quie

sueños, quie

o dentro de mí, m

r solo. Solo q

tan oscuro e

o cuán dest

orque no pued

.

latidos de

llamando por

idad. Estás b

ahora y sálva

mor antes de

ahora y sálva

mor antes de

.

más en el espacio

unático, por favor,

ravieso, y eres tú

que tu

y es la única ayuda

í, eres lo ún

fuerte para que al fi

mbién empezó

latidos de

llamando por

idad. Estás b

ahora y sálva

mor antes de

ahora y sálva

mor antes de

.

dejarme se

r. Por darme ala

rme cuando me e

sueño que era todo l

pienso, sa

tiro mi

porque somos

untos el c

ahora y sálva

mor antes de

ahora y sálva

mor antes de

conexión que tenía Thiago con Matheo, el castaño podía

s que eres su hijo, cuando esa canción tu padre la escribió y me la dedicó

ión un día de lluvia... —el ser no sa

l y tú, es que él tenía los ojos con un hermoso iris colo

—una tercera voz se dej