y comenz

os de

en su silla y juntó l

o todos los caminos a tr

viven a su alrededor si vier

ir la inf

lujo que no tenem

asa. Esper

erare

ar de ponerse en contacto

a casa. Mantente ocupad

te para

nsaje esperándolo

, pero si s

sea, te lla

e a casa, Marcus se si

y supo que no había nada

. Con su familia presente

ligado a alejarse de las mira

rm

ólo con su camisa, la piel e

uca hasta irritar la pie

ensamientos tortuosos de

.. asus

cia atrás en un gemido

gritar, gruñir,

go otro. Finalmente, no

so el abrigo y bajó las escal

chillo en la vaina de su bota

astimada de todos mo

o que el mayordomo abría la

o de polvo debido a su rápi

a cuando Marc

de est

o a Essex

id i d di

Ravensend. Residencia de su

aba huyendo

vió hacia Paul, que estaba

ci

ré en

bien? – pre

rá pr

egundos, Marcus e

e Westfeld crujieron sobre

nd Manor, antes de

propiedad. La luna ya esta

a gran mansión y la pequeña

aje y ordenó a sus homb

mansión, tomó el camino

estaría Elizabeth. Se anunc

residencia estaban apag

rta con cuidado, silenciand

tros de distancia. Caminando po

ción hasta que enc

nto a la puerta, Marcus se desvis

a. Elizabeth se agitó

odavía profundamente dormi

endo inconscien

stración, la abrazó. Su

do a pasar las noches a su la

or

con ella por haberse escapado

a más importante en su men

a más dudas de que ell

ge, ni en

n, hundió la cara en la cur

y se

y se hundió más en el c

se estiró y su pierna se

Mar

o, se sentó y mir

ajo, con las sábanas cubrie

usculosa

ma como si estu

ú ñ l

sueño, y sus labios se

dormir, obviamente consid

no era u

abeth se dirigió a la otr

encontrarla tan rápido. E

amilia para que sea lo más

lo había localizad

contrarlo en su cama, Elizab

ía por el acantilado

el empinado y rocoso de

derable sobre la playa y Eliz

o a sus pies. No le importab

ó de la distrac

la playa, se sentó en la a

l sonido de las

te el primer momento

efton. Recordaba haber pe

celerado hasta que pensé que me

ó de la misma manera much

reía soñoliento mostran

í, no podía imaginar có

parecía insaciable. Sin exp

odría desear el toque de o

hora, por fn, tenía una i

s. Sin su madre, permanec

e pudiera aliviar el vac

zabeth cerró los ojos y hu

no podía simple

orche y admiró la vista. El a

Se preguntó si Elizabet

ue se horrorizó al desc

ola muy bien, sospechó

sarlo d

diablos

tfeld,” dijo una voz a su

beza para saludar a

inó la cabeza. -

presencia aquí. Espero que

impo

o negro por las riendas y s

misma edad, Marcus era c

sado mucho tiempo desde l

aminar

abandonó de mala gana la som

ll d i ió l

, advirtió el duque. - L

Marcus tomó e

nsend? preguntó mientra

bservó detenidamente el cam

ue sería más inteligente

Hawthorne sigue siendo una de l

ar. Yo mismo la cortejé

mb

Marcus pateó una pie

eguirá después de que te

n joven, estoy seguro. El

e hizo un gest

pretó los

el sentido más casto d

én. “Hodgeham n

tú pu

cualquier

con ella. ¿O tal vez esa e

Y has caído en e

e planes de vo

ensend, asintiendo con co

l instinto, el

Eldridge, William y ahora Ra

en sus asun

óname,

minó rápidamente hacia el se

estas intrusiones d

la orilla, recogiendo pequeñas

ua, tratando de que rebot

a vez, William pasó toda un

que nunca aprendió, el mo

e la costa inglesa – el romper

go de paz a sus pe

ranquila, mi amor", dijo la e

ros, se volvió hacia

suéter raído y pantalones de l

e sus rasgos intactos por

uca, pero la brisa del mar s

inda

o le dio gan

s haber ven

uve el

algo de sentido común, ¿perm

entre nosotros moriría con gr

nevitable

en su mandíbula se contrajo

or tirar lo que hay entre nos

ada Arriesgan

puños ante el ton

la escol

razón que has mostrad

empre lo fue, desde el pr

voluntad. Regresa a Lo

mujer para ar

izabeth comenzó a camin

del brazo cuando ella trató d

un grito de sorpresa

su

gaste tú. Mi vida era sen

lda No t

tanta fuerza que

bargo, me

el camino de

desées.

o lentamente d

os, Elizabeth se volvió

o un baile en el baile de M

meralda. Pero esta vez,

ntando la barbilla. - Me

do sobre ti me asusta. e

r mi

una respiración profund

a, y el ritmo implacable y

s parecían gritarle que h

io un pa

s semanas”, dijo rápid

huéspedes. Vive con

ó ll

reguntó ella,

los brazos s

casarme

repentino, Elizabeth se apartó

s faldas, cayó de rodillas.

urvó en una a

rentem

inó hacia delante, hundiendo

Marcus.

una idea tan ridícula?

mp

ebo casarme Y tú

tiendo que se le r

Pero la pasión un día t

esposa y buscará el

ma manera, entonces no t

ce

os puñados de aren

para el

u suéter con enloque

ón posesiva, mi amor. Ten

derecho a s

tro en busca de señales d

élida indiferencia. La c

entos. Pero la determinación

ili

so volver

Marcus levantó la mano y l

Gran riqueza. Te permitir

rne. Y me tendrás en la ca

sulta muy

Permítanme también contar l

o. Buscas la muerte. Y e

a, le ofreció la mano

nas para que cambies de

paz y nunca más te mole

ente se encargar

cudió su

muy diferente de lo qu

poco peligro aqu

Pero tal vez pueda hace

e preocupará por mi

mpos

Eso es todo lo que pid

ojos era evidente. – Sé

ró directamen

tocaré.

es m

evantó u

ontrolarme? Compartí la

mor. Te puedo asegurar q

des más

, considerando sus opciones.

siemp

tra habitación?

es no int

curvó con picardía. - C

preg

tada por su

ndes consegu

ó la voz más s

en tu cama. tengo la inten

l resto de tu vida. No s

so dicen que so

on nostalgia, poniendo s

ué una

encogió

” sería la respuesta más si

eres muy obstina

las manos a la cabeza

icho que

scubriera la agencia. Es

i

ofa

a ocuparte de tu propia c

ilia? Seguro que no quiere

n los ojos muy abiertos. Mar

atravesó su cuerpo de r

lla se dio la vuelta p

y el resto de la descenden

mirarlo de nuevo. Aturd

se volvió y comenzó a camin

rdo? – dijo, quedá

ncima del hombro y su voz

ces desaparece

a palpable y ella quería ale

illas. Matrimonio. La pa

o como un nadador que ha

untad de Marcus era abrumad

bía estado pensando en

miró angustiada el pues

rse y dejarl

. Marcus iría tras ella, si

mucho que lo intentó, Eli

de su a

de deshacerse de su atención e

que terminar su búsqueda po

e ese hombre testa

zabeth se levantó y caminó haci

idado. Él la conocía demasiado

ilizado por él para pre

tar relajada e indiferen

tenía un plan de acción,

s se quedó en la playa

, todavía la deseaba.

ba satisfacer su nece

para que su deseo nunca ter

grande p

trampa que le esperaba a

bía forma de saberlo. A pes

aber imaginado el éxtasis a

cada vez mayor que sentía

perdida en el

ontón que Elizabeth había

un gran desafío para sí mi

d b í l l

que Ahor ambosa no sentían podía usar el uno la seducci

la como un caballero, algo que

ra la pri

a frustrar los planes de E

todas que Isabel era su

e

e hombros. Finalmente, su

cu

r adónde

su oído, llevándola con

ría una sorpres

s sorpresas”, se

tumbrarte, querida, porque

corazón ligero como la nieb

ue no te gu

curvó en una sonrisa

e cubre

cia no cono

ó en el aire y luego cayó sobre

te dispuesta por él y le quitó

as parpadeaba contra el r

í

entes del duque, había org

a mansión principal don

nte tensa desde su conversaci

r algo inesperado s

con los ojos muy abiertos

a y no está dispuesta a deja

do sorprendentemente s

valizaba con la singula

grado sorprenderla, Mar

a maravillosa, su hermoso

sombrero

o en la cesta y sacó una

o el deslizamiento de sus dedo

de tu e

probación,” murmuró

jo formal – sus miradas

vioso, a de

Ella arque

umbó boca arriba y miró hac

ría ser rechazado. Me se

rn

gradable sonido trajo

didato mucho más adecua

notable belleza masculi

die

n una mujer así. pref

stinada y sedu

uctora! Ella prot

otra noche. La forma e

rme locamente. Lo juro, nunca

iencia

rrumpió ella, sintiendo que su

ul y R

entrecerrados, adorando ver

la sociedad. La hierba a su alr

el aire con el aroma de la

Preguntan por ti,

rende pero me alegra s

an pasado casi dos semana

en ningún ev

e interés en los eventos

tiempo allí. Y mi madre nece

irse antes de que estén list

r vista con el vest

la s

sigue sien

o que

te p

, pero no más de la espera

res de tu hermano.” Él to

física. Ella trató de liberarse

verás por ti

rrugó l

do en tu habilidad

otra manera. Ahora d

iciendo d

a enojado e insoportable co

ici

di f ó d

us disfrutó de esta rara ocasió

ntento de simplemente disfru

l

o tan en serio? pregu

suspiró. – William

a menudo y jugar e

que bailé en la

recu

mente y tomó un largo so

cuando salió, pare

r tu olor o el tono de

estar

iciando su mano con el

e quede solo en una vaga

istece. Por eso es ta

rápido que tomó a todos p

pad

a voz de Elizabeth cuando s

a cabeza en su mano, manteniend

estudió in

nunca se vol

mirada, frunciendo

madre como para encontrar

ación lasciva del conde d

r su propio disgusto por

preguntó con curiosidad.

todavía sé muy

pas más que yo. mi

que él me evita. A menudo

orado. Dios sabe que tr

a vida

ojos y una frmeza en sus

recharla entre sus brazos y

rayéndola contra su pecho

y la olió. Juntos o

or mi madre cuando mi

iciaba los brazos. - No

e tus padres, los míos ta

mujer fuerte y se ha recup

i madre encontró la

, dijo Elizabe

lla no lo necesitaba no

de que supiera sobre la dec

arcus tomó la c

ta con

nte aliviada. Luego mostró

ear y calen

lla era suya y él la proteg

su espalda al recordar l

ra estado en casa? Apretando

to ave

a un pequeño precio p

Capít

de la mansión

l diario de Hawthorne y encont

ró el libro y se quitó

ceptó el brazo que le ofre

r atacó la ternera c

ve sonrisa. El apetito d

No hizo nad

tas te han hablado de

secam

rse”, respondió entre boca

ático y requiere

nte capaz de cu

mirada penetrante ba

aqueada después de qu

areció de su rostro. Su b

uando lo vi. Pensé que

agitó frente a su cara. -

sa m

istró sus palabras. T

ron algo? E

Marcus bajó los cubi

y a rest

pareció demasiado arrogante, a

miento t

ermo? Ma

dijo, calmándola y

am ya debe saber

tú eras el responsable d

de rabia por mi cuent

pecho, Elizabeth trató

aron". Ella se estremeció

tes

emasiado alte

ue me sacudió,

para sentirte violada. doy

Pero eso no es un estímu

q

ro”, respondió ella, con las

male

muró, recordándole que

da de Isabel. - Pero nec

s, cada minut

a y sintiéndose culpabl

necesitaba un descanso! Ma

nte fru

", or

mó un sorbo de vino en un

que sentí

cena en silencio, ambos p

ala de estar. Elizabeth v

uitaba las botas y c

ir su mirada, lo vio hacer

aba un brillo dorado sobre

abeth sintió un anhelo famil

su poderoso cuerpo fexio

n placer decadente. Después

ones demasiado fuer

lvió su atención al dia

ás en las interminabl

era muy consciente de la mi

l l b d

vantar la mir cabezaando y y responder, eso destruiría

inuó monitoreando discre

en el cuero

ina, estaba sentada en e

. Su cabello había estado

ntaba tocarlo y agarrarlo

omo en el comportamiento, Eli

la resp

sonrisa. Como siempre,

do por su presencia. A él n

í solo con ella, sin sirv

ju

radas. Dios. E

rio con un ligero clic.

eseo corría por sus venas

intió una punzada de es

star", dijo con voz ro

profunda

n tem

oy ca

ijo, tratando de sonar lo m

l trabajo e

de la puerta y miró a Marc

mesa y la ataque. Pero é

ía estado haciendo desde la últi

l

mente antes de cruzar el p

tra la puerta, cerró la ha

ó y se puso el camisó

los ojos, se

Su mente saltó entre vari

manos de Marcus, la sensació

tras llegaba al clímax den

ra, pero aun así priva

loca a E

ada, deseaba desesper

no podía olvidarse de

idad. La piel se sentía demasia

hinchados, sus pezon

las noches y había saciado su

que pueda estar con él de

nta de su toque y las cari

cama y sus movimientos la ponían

l y cabello húmedos de sudo

o de mitigar el vac

estaba loco. Cuando se

as ella se quedaba en casa, tal

r

o lo necesitaba. Eliz

r un gemido ante el repenti

que estaba mal, no pudo

tras imaginaba que era Ma

voluntad: su cuerpo estaba d

había vuel

por su cuerpo y se desliz

ndo encontró la f

rás y dejó escapar un grito a

mis

anta fuerza que se estrel

da, gritó

furia silenciosa, con un

Puedo oírte —gruñó, ava

s noches. – ¿Preferirías castigar

ver

orrorizada de haber sido

rome

de noche y agarró la mano d

y aspiró el aroma de s

e chupó

lizabeth sollozó mientras el

re sus dedos, chupando toda s

racias a Dios que había ve

n momento sin tu

dedos mojados sin contempl

preguntó sin aliento, llev

tener el

ntraluz por la chimenea, Mar

adiando una energía oscura

seducción, sólo un irref

ando el alivio

es y retiró su magnífc

sa, su erección latía con ve

abrió

la cabeza de m

ó l b d

res esto". Su mano agarró la ba

op

a. Él fue despiadado.

que

mi promesa", dijo co

egalo para ella. – ¿Quiere

eno, no lo haré, mi amor.

i pa

Cre

atando de seducirme, ofreci

ga la entrada - movió la ma

e su er

irte con la tuya? Ella sus

o y odiarlo con la

ue negarme? Respondió

piel como

y le dio la espalda... y

stró hasta el borde del co

es un

ocando sus manos a ambos l

ón presionada entre sus muslos.

cía

las piernas abiertas

muslos, Marcus la provoc

ondequiera que fuera. – Si

ata

tó las caderas y casi lo

sólo la punta,

retiró ma

s valioso, te follaría de l

as nece

se acumularon y corrieron po

ría. Si no fuera por su

ue le gustaría qu

les, la colocó de la manera q

pie con las caderas en el borde

la medida de lo posible. ella

o resplandeciente estaba ilumi

poder mientras que

rostro, luego recorrió

orso mientras se movía. E

ó su mano a lo largo, con

Su mirada estaba vidri

al verlo. Nunca había vist

r imaginado algo como e

n esa posición, sin embarg

mplia mientras se da placer

ó de sentarse, pero su

enó escuetamente mientras a

pene. – Apoyar los t

ios y el gesto lo hizo gemir. E

a ola de calor subir por

esmeralda se convirtió en un

ina

e dio cuenta de que el poder rea

eseaba, cuanto la des

ad cuando todas sus acci

confanza, abrió aún más

e. Ella pellizcó sus pezon

ombeando su polla con

te placentero. Sus mano

movimientos se hic

se entre sus piernas y lueg

eth se preguntó si él sabía

na vista i

Isa

gemido atormentado en su

fagas lechosas entre sus ded

or la impactante intimida

en las almohadas c

villoso y disfrutar de

os había sentido antes, Eliz

iagador sabor salado

r un momento, mirándola

ego se dirigió al baño

mientras se lavaba las manos.

gasmo de su vientre y mus

sus manos. Se inclinó y

o en tu

abitación de al l

una palabra más y sin mi

errada con la boc

¿no? No podía ser so

aci

e negó a gatear para

ro sintiendo frío sin ellas,

h d l

as horas del amanecer. Se

de

go de la chimenea, pero la h

alrededor de sus pies, recogió

do de

do a iluminar el cielo

mida con el diario de Hawth

sonrió

mnio, ahora solo q

que aquejaba profundamente

equeña residencia. Cruz

incipal como la casa de h

ico de las olas rompiendo en el

a. Tan pronto como entró en

y los caballos, un marcado c

ra

ballos de su carruaje

r hasta el agotamiento para

s caballos. Cuando el cal

erdido en pensamientos de la

e eróticamente bajo la

a alguien excla

nfrentó a la hermosa jov

o ella, inclinán

de los novios detrás de

mie

seguró. – Soy ciego y mu

n evidente curiosidad. S

Sorprendido de sentirse un p

, se volvió para recoger

taba colgada en el establ

por dentro tuvo la

ró su mano lesionada y mi

qu

", dijo la niña con sim

, que Marcus aceptó rápida

detener

ita, con mechones marrones

o, traicionando sus activ

na de buen humor. Marcus

del establo se abrió, so

arrojando a Marcus contra la

al

dito ba

hombro de la chica y se enco

to por un momento. Elizabeth e

las manos en

por ningún motivo! ella grit

e falda

ie en un instante y rápidamente

alabra, comenzó a correr

o y todavía somnolient

stumbrada al esfuerzo fís

Marcus acele

liza

inferno!”,

camino demasiado cerca del

ltó y la arrojó a un lado, ater

y hierba silvestre le raspar

mañana, sosteniendo el cuerp

para sujetarla debajo de

l

e para ti, maldito" -

nrojecido y mojado

lo que

idesnudo encim

cidente.” Le sujetó los bra

a mañana, el dolor en la mano

us cejas con fuerza, toda

mujer luchando

raparon”. Elizabeth giró la

ó su rodilla entre sus piern

mira lo que puedo h

dispararé",

bajó la cabeza y la be

eth antes de tirar de su cabeza

dien

ru

to mi fdelidad, deb

po c

boca, so

tan arrogante en un

uieres, pero Dios no lo q

l

qui

enerte, y sentiré m

ente contra

o una aventura con uno d

provocó el

r qué estaba t

cus agarró sus muñ

endada. – Ella estaba

ero relajando sus rasg

é estás s

amor.” Marcus negó con

presentaré a la chic

se deslizó po

, dijo. Se afeitó los

l

e conmigo. te juro que qu

a cualquier

cruel.” E

eth", admitió bruscamente

cuerpo solo exacerbaba

quistarte? ¿Podrías darme una

eda por recorrer

en sangre se encont

No pierdes el interés? ¿Por

a pe

resignado a la

que no

jear con un di

e. Se parecía a él: can

vueltas y vueltas en la cama, d

s del resto del mundo, sol

emocional par

la conocía, Marcus admiti

el uno pa

a amante? preguntó de

de tema, respo

embló bajo

partirte con

ediría eso”

eshacerte

la cara y la

casarme con ella. Elizab

ariz contra la de ella. -

ees que tendría la audacia

mpo para pen

prometió rápidamente.

ta había

en su cuello y luego dej

Tendré en cuent

Capít

mente al lado de su cama. L

tercera noche de su estancia

bitación. No había ninguna ra

omando sólo una o dos h

ch

anos. Si no pudiera obtener

a por Marcus, s

días, había recopilado c

na toalla en la playa, Marc

oz alta, Marcus frente

cubre el fueg

ma en que frotaban la parte pos

arba oscurecía su rostro

sus ojos cuando se burlab

cuando é

lmente la

y el timbre de su voz

arla y tocarla y hacerle

nunca tratar

os entrelazadas frente a

acer un esfuerzo para que el

ra algo inc

ba ella aquí, paseándose

alivio que buscaba estaba

ra ella, eso lo sabía Elizabe

strillo de renombre, había

lla quería encerrarlo en la

alquier otra persona. Sólo ent

a respirar y no sentir e

rlo en cualq

n posesiva, mi amor, le h

arte conmigo si quieres tene

conservarlo, a declarar su

tortura que sa

sociarse con un hombre co

dirían cualquier posibilid

de decepciones. Y el deseo

min

ama, recordando la pro

tu nombre y el derecho a tu

ad

omentar más, Elizabeth

ación de Marcus s

a, desaceleró sus pasos cuan

extendieron. Sorprendida, m

ente a la

l il i d l l

il, iluminado por la lun

pad

Mar

, Isabel? preg

e su vestido con los p

emana que no

s tu sueño en e

hora que estaba allí frent

oraje fu

ras eso", admitió,

s di lo q

labras, Elizabeth se quitó el

i

ncadas. Envolviendo tus braz

uñido, agarró su cuerpo des

invirtiendo su lengua en una

a por

brazo, levantó y ancló

va de su culo con los dedo

dos de su sexo. Gimiendo d

ombros, presionando sus pecho

hasta que se hundió más p

quemó la piel del vientre de

dedos temblorosos alrededor d

el equilibrio. Él pulsó en

se estremeció c

a respirar cuando sus

e que conocía muy bien

su deseo, volvi

dió el rostro en su piel

odo su

vor", s

r fav

us caderas para seguir l

ué? demandó, re

ina privación de placer,

tu

llévame. Y

, Isabel? ¿Una h

nchazón de su pezón y

e di

as noches

suelo y dio dos pasos hacia

das sobre su cuerpo. Eliza

ulso f

sab

risa",

us muslos, Marcus la

ro y grueso que nunca,

ó cuando llegó al clímax inm

cia y con la des

ro en el cuello de Eliz

espasmos de su orgasmo ap

vino, inundándola con su s

edos de los pies y arqueó

roso. Perdido por un mom

completa de

nos minutos, pero se sintier

ra de ella. Puso su cuerpo

ntos, sus cuerpos aún unid

o fueron diezmados por los temb

cue

contra su pecho. El sexo s

unca había experimentad

endido a él, había reconoc

sea posible

l vello de su pe

a tu trabajo en la age

salir todo el air

pides demasi

spiró, calent

e matrimonio sabiendo

? – replicó. - Nunca me cansaré

tió gentilmente, mostrando

ción re

ria", dijo

uy bien, Elizabeth. Y sé

s

se instaló más profund

, ¿cómo lo

r. Nos llevamos mu

él, empujándolo aún más pr

a erección. Ella lo estu

n problemas. Entonces ella

a en el más íntim

puños agarrando las sába

cus había sentido que s

anas de volver

e su pene se deslizara libre

s dejar Eldridge.” Ella des

umulaba en las

sabe

aer, acariciando su poll

siderarás con cariño.

gem

ldit

bió, sacándol

, esperando que su magní

o ella vaciló, Marcus abri

seguiría esperando hasta

ba s

arla, Marcus se ri

o pr

mpensa val

Dios

esaltada al escuchar el fam

us empujó su espalda y ell

hacia la puerta, sintiendo que

do he

Guil

de pie con la mano

s en la sala. Por favo

ormecido, Elizabeth se lev

descalzos tocaro

a mí mismo que William n

rgo, siempre se las arr

sab

quisitivo en la voz de Ma

cama. Fue un momento incó

rrebataste la promesa.

a realidad. Ella accedió

ue la afnidad sexual y l

estab

la cama, mi amor —mur

rm

camisón en la mano, El

alones. Mientras se movía

abdomen captur

ista y sonrió

sa, toda dorm

ue mi apariencia e

ngo que ver el día en qu

camisón de las manos y la

punta de

anta prisa por lev

ó hacia el armario y termin

iente y

ahora mismo que no recib

Hablaré

te ante la terquedad de Eli

ara acost

quieras,

on una mirada cariñosa antes de

asillo. Realmente no debe

allí. Sorprendido y frustrad

estaba lo sufcientemente ap

edido que se casara con él, se

ió los desembolsos matrim

aron las intenciones y se

podría haber adivinado que e

se casaría con otro ho

el momento, él solo tenía su

o que no era

i bi bi

a subieron como bilis a s

e había hecho, Marcus n