NIC
nos minutos frente al plato lo deja vacío, después camina de nuevo al balcón y se echa en el fresco. Por mi lado me quito la camisa y la dejo sobre la silla que tengo a la mano. Prendo el aire acondicionado y
iseta más fresca y busco mi libro "el camino del artista", tomó una cerveza del refrigerador y des
abló mientras él vuelve a echarse y me ignora p
rme un poco sin embargo, vuelvo a recordar ese aroma y me distraigo nuevamente ¿era azahar? ¿Lavanda? ¿Vain
en Neo ― le digo ― ¿Por qué
rvando la pantalla ¿qué debería de buscar? ¿esencias que enamoran con tal sólo olerlas? ¿Esencias hechizantes? ¿Aromas qué enamo
ilidades de búsqueda? Neo sigue echado al lado de mí, duerme tranquilamente, lo observo y a vec
aseo? ― le pregunto y é
e envuelven sin que pueda evitarlo. Ya no sólo respiro el aroma de la mujer, sino también el del mar, que me in
Este será un paseo rápido ― sentencio, pero él no hace caso y comienza a olfatear. Llevamos varios minutos caminando hasta que llegamos un
reso «¿en qué momento oscureció tanto?», me pregun
éndose en un ritual, camino hacia el balcón y me siento a cenar solo, Neo esta vez si está atento ya que desea lo que estoy comiendo ― ya sabes que sí te toca, sólo espera ― ordenó. A veces creo que estoy loco por hablar con él, pero según he le
rrer todos los días ― le advierto o tal ve
to? Esa es la cuestión, ojalá mis decisiones fueran tan fáciles como eso. He dormido hasta tarde a
ual no he podido apreciar anoche a causa del cansancio; cuando mis ojos se distraen ante la manera que la luna se refleja en el mar. In
he bañándose en el mar? Al principio quiero ignorarlo, pero no puedo, la combinación de la luz, la noche, la luna y el ruido de las olas me hechiza y de pronto nuevamente las historias en las que
ne a mi mente ― Claro que está desnuda ― susurro para mi
e pronto desaparece por un momento y me alertó, tal vez esté presenciando algo más y yo aquí arriba imaginando cosas que no son. Sin embar
pregunto si todo lo demás será igual de impresionante que lo que se ha dejado entrever. Le veo envolverse en un manto para luego desaparecer ¡Qué espectáculo me ha dado
entrar a la fresca habitación y recostarme. Neo yace dormido y cierro los ojos para intentar hacer lo m
EL
en mi cuarto entreteniéndome con mis libros, con mis lienzos y óleos. La luna comienza a asomarse una v
cho la oportunidad para recorrer rápidamente el camino interno de mi ruta de escape hasta llegar al jardín. Envuelvo mi velo en mi cabez
jaula de oro y sentir que mi
ie
enal
o que
uridad de la noche y llegar a mi tan amad
noche quito mis miedos adentrándome al océano que parece arrastrarlo todo con sus olas. En el fondo tengo l
e abraza y me refresca. La vida está llena de sensaciones placenteras ésta, para mí, es una de ellas. Continuo sumergiéndome poco
ueven con un suave vaivén y a pesar de que estoy completamente sola aquí; me siento más
o que la oscuridad del mar me tome por completo. Le tengo más miedo a la jaul
las olas y disfruto estos gratos minutos donde soy una con el mar, sin embargo, de nuevo vienen a mí las prisas, debo ir
he sido tímida en ese aspecto. Tomo entre mis manos mi largo cabello y quito el exceso de agua, podría tirarme
ío; su mejor secreto, su fórmula, el lazo que nos une a pesar de que no estamos juntas físicamente. Recojo mis