dr
ara que le acomodaran rápidamente una mesa V.I.P a pocos metros de la que ya tenían mis amigos
ía algo solo tendría que correr unos metros para escapa
invitándome a tomar asiento
erpo de modelo de
ritó cuando pasó en frente de la mesa tomada de la m
uego sentí el r
que el hombre a mi lado entendí
ernas hacia la mesa donde habíamo
dad para mí. Aunque dentro de mi realicé que Julie
migas con las que vienes, si no es así, que atrevida- el hombre me dijo
ue ser apaleada en la entr
e muchas cosas- le respo
egué con la cabeza mientras que el ho
o realmente sorprendido y
bien
no tener que mentirle a la cara. Estaba con este hombre, sí. Pero n
ía acab
so uno de sus brazos sobre mis hombros y un escalofrío recorrió mis piernas
las cosas que estaban
carcajeo ajen
y a hacerte nada que no quieras- el hombre le dio un sorbo a su bebida más tranquilo ytido naranja y al parecer mi autoproclamada enemiga hacía que
spondí molesta al hombre. ¡Pero que vulga
para enfrentarla corazón- dij
mía y ahora si repare total
omen marcado por el ejercicio, su rostro ondulado tenía hoyuelos y una corta bar
y para ninguna sorpresa Julieta
me asesiné- le dije al hombre y luego temerariamente le d
evitar hacer muecas. Al menos era su pro
damente el hombre perdió la sonrisa del rostro cuando de las escaleras emergió un joven de piel blanca y pecas en
cohol que había tomado con él, de reojo busqué la mesa de este hombre, p
y cuando la encontré en medio de la pista ajena a todo
e iba a matar en es
ompañante del rubio alzar la mano ya algo exaltado mientras hablaba note que los nudos de sus manos tenían m
, mi amiga me está llamando- dije intentando mantener la calma mientras
marcarle, pero en ese instante el hombre que tenía los nudillos mancha
otalmente ajena a la mía y me quede impactada. Ni
s escaleras dispuesta a dar la carrera de mi vida y lanzar mis tacones para aclamar aten
or la muñeca, no pude evitar chillar del horror cuando el
das. Las botellas de alcohol arriba de nosotros explotaron haciendo una fina lluvia de cristales y bebida. Lucesda cuando le grite al rubio el cual ya tenía el arma e
escaleras solo para lanzarle algo al primero, el de ojos azules atrapo ágilmente lo
s rojos desapareció rá
música y las demás luces de co
realicé que había un cuerpo tirado de un mesero, el cual
os lados mientras la música ahogaba los gritos de muchos, otros se lanzaron al suelo e in
día estarm
no
que yo hubiese quedado a
aban mis amigos? No podía es
y en todo su peligroso esple
para que su arma qu
endo
odo por una men